El primer viaje que el presidente Donald Trump realiza tras volver al poder, es al estado de California, el cual ganó gran notoriedad, debido a los potentes incendios en Los Ángeles registrados a principio del año, que han provocado daños de millones de dólares.
Trump optó por realizar su visita a tierras californianas, en vez de asistir a la marcha antiaborto conllevada este viernes en Washington.
El presidente republicano ha mencionado anteriormente su decepción con la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés); tras el huracán Helene, Trump criticó en el manejo del desastre natural, el cual cobró la vida de más de cien personas en Carolina del Norte.
El mandatario adelantó al público que planea firmar una orden ejecutiva para revisar y reformar a la FEMA, o hasta incluso deshacerse de ella.
Hasta el momento se han registrado 25 personas fallecidas durante los incendios forestales en California, con severas afectaciones en infraestructura y pérdidas en millones de dólares en hogares.
La visita de Trump podría presentar una oportunidad para generar una mejor reputación entre los habitantes del estado, el cual es principalmente demócrata.