México

Luz Elena Baños Rivas, embajadora representante permanente de México ante la OEA, planteó lo siguiente:

- México externa su seria preocupación ante el grave quebrantamiento del orden constitucional en Bolivia, en donde ha sucedido un golpe de Estado.

- Consideramos que las presiones que Evo Morales recibió por parte de las fuerzas armadas y los cuerpos de seguridad del país configuran elementos de un escenario de golpe de Estado, lo que México rechaza categóricamente.

- Tenemos una alta responsabilidad de acompañar a Bolivia en estos momentos de profunda crisis, de manera objetiva, responsable y respetuosa de su soberanía y su autodeterminación, sin tentaciones de intervención.

- Deben quedar atrás los días aciagos y dolorosos donde las fuerzas armadas deponían y sostenían gobiernos.

- México reivindica y demanda el respeto del orden constitucional y de la democracia en Bolivia.

- El expresidente Morales renunció en aras de pacificar a su país y poner un alto a la violencia que venía incrementándose en los últimos días, y que lamentablemente aún no ha cesado.

- México respeta esa decisión y espera que así se evite la continuidad de la confrontación y la violencia, y se garantice el efectivo derecho del pueblo boliviano a la paz y el ejercicio de su democracia.

- Rechazamos la violencia. Deben evitarse mayores años y posibles pérdidas de vidas humanas.

- De conformidad con su tradición de asilo y no intervención, México ha recibido a un grupo de personas del Ejecutivo y Legislativo de Bolivia en su sede diplomática en La Paz.

- Decidimos apoyar soberanamente conceder asilo político al expresidente Evo Morales, cuya vida y seguridad se encontraban en riesgo derivado de las manifestaciones de violencia en su contra.

- Tenemos una obligación ineludible basada en nuestra historia: otorgar protección a las personas que así lo solicitan por sentirse amenazadas, tal y como lo establece la Convención Interamericana sobre Asilo Diplomático y la Convención de Montevideo sobre Asilo Político.

- México agradece cumplidamente la confianza depositada en su momento en nuestro Gobierno para acompañar a Bolivia, junto con otras naciones, en la valoración de su proceso democrático.