CIUDAD DE MÉXICO, 4 de diciembre (EL UNIVERSAL/SinEmbargo).- El Presidente Andrés Manuel López Obrador informó que, durante la visita de William Barr, fiscal general de los Estados Unidos, a México, se tratará el problema de trasiego de armas y dólares, ocupados por organizaciones del crimen organizado.
“Va a estar en México el procurador de Estados Unidos, se van a llevar a cabo reuniones con el propósito de fortalecer las relaciones de operación entre los dos países, y desde luego dos temas que se tienen que tratar son el de la introducción de armas y de dólares”, dijo.
En su conferencia matutina, el Presidente reiteró que durante su administración no habrá un operativo como el fallido “Rápido y furioso”, realizado en la administración del expresidente Felipe Calderón, al que consideró una “violación flagrante contra nuestra soberanía”.
“Fue una violación flagrante contra nuestra soberanía, porque se permitió que entraran armas que, luego se demostró, que se usaron para cometer crímenes, y fue un rotundo fracaso el plan. Esas actividades, esos acuerdos, no se permiten”, señaló.
Indicó que lo que su administración plantea es que del lado estadounidense haya control de salida de armas y dólares.
El secretario de la Defensa Nacional, el general Luis Cresencio Sandoval, informó que hasta el momento se han hecho 52 aseguramientos en transporte de carga, a los que les hicieron modificaciones para poder meter las armas y el dinero ahí.
Detalló que el Presidente López Obrador los instruyó a cambiar los puestos de revisión, de sur a norte, para que, sin dejar de vigilar que la droga no salga, se verifique que no entren armas, y afirmó que han tenido más resultados.
“Les informo que mañana recibiremos al fiscal general de los Estados Unidos, William Barr, para avanzar en la cooperación bilateral por la seguridad. Sostendrá encuentros con el Presidente de la República, el Fiscal General, Secretario de Seguridad y Relaciones Exteriores”, anunció este miércoles en redes el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
Además de López Obrador, participarán en el encuentro el mismo Ebrard, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, y el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero.
Asimismo, acusó a anteriores gobiernos de México de permitir que desde Estados Unidos “entraran armas para supuestamente seguir a miembros del crimen organizado y esas armas se perdieron”.
Tras la fallida operación de captura del narcotraficante Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “el Chapo” Guzmán, funcionarios de ambas naciones se reunieron para acelerar un programa que permita congelar el tráfico de armas de Estados Unidos a México.
Tras la masacre contra los mormones a inicios de noviembre, LeBarón pidió a través del portal de peticiones de la Casa Blanca que el Gobierno de Estados Unidos declare a los grupos de narcotráfico de México como “Organizaciones Terroristas Extranjeras”.
En una entrevista, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró: “Sí, designaré a los cárteles de la droga. Absolutamente”, sin detallar las consecuencias de su decisión.
El Gobierno de México criticó este anunció y dijo estar a favor de la “cooperación”, más no del “intervencionismo”, y estableció comunicación con las autoridades estadounidenses para tratar el asunto.