CIUDAD DE MEXICO, 8 de diciembre (NTX).- ¿Cuándo fue la última vez que desinfectaste o, al menos, hiciste una limpieza a los productos que utilizas para maquillarte?
Es curioso que, a diferencia de otras cosas que usamos en nuestra vida cotidiana como ropa, accesorios, zapatos, entre muchos objetos más, con las esponjas, brochas y cepillos –que utilizamos en la rutina diaria–, a pesar de que muchas veces las usamos con las manos sucias o en espacios poco salubres (como el baño o el transporte público), no existe la misma tendencia a lavarlos.
Sin embargo, no tener el suficiente cuidado e higiene con los productos involucrados en la rutina de belleza, podría traer consecuencias graves. De acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de Aston de Birmingham (Inglaterra), buena parte de los productos de maquillaje, entre ellos esponjas para aplicar bases y correctores, cepillos para rímel y pinceles para labial, están contaminados con microorganismos potencialmente mortales.
La universidad destaca que la presencia de elementos patógenos en estos productos se debe a que muchas veces se usan mucho tiempo después de que ya caducaron (sí, el maquillaje tiene caducidad) y, principalmente, porque se lavan poco o nunca aunque sean porosas o tengan texturas susceptibles de guardar residuos tanto del producto de belleza como de sudor o piel.
La investigación arrojó que bacterias como E. coli y Staphylococci, son algunas de las que pueden estar en los productos y que son capaces de causar desde infecciones en la piel, hasta envenenamiento de la sangre si se usan cerca de los ojos, la boca, cortes o raspones.
Las esponjas para aplicar la base del maquillaje son las más propensas alojar esta clase de microorganismos, pues suelen quedarse húmedas, creando un campo de cultivo ideal para que se desarrollen las bacterias.
Tips para evitar la contaminación
• Lava todas las herramientas al menos una vez a la semana (cada una tiene diferentes indicaciones de limpieza)
• Usa productos especializados en desinfección de las herramientas –esto, además, te ayudará a cuidarlas.
• Usa productos que tengan dosificadores que eviten que lo que no ocupas en el momento tenga contacto con el ambiente o los aplicadores.
• Lávate las manos y la cara antes de usarlos.