En el sitio arqueológico Teotihuacán, sede de las imponentes pirámides del Sol y de la Luna al norte de Ciudad de México, millares de mexicanos y extranjeros, con los brazos extendidos y apuntando hacia el cielo, buscaban recibir la energía del sol que ayer cayó sobre la superficie terrestre desde su punto más alto en el cielo para recibir la Primavera boreal. (CUARTOSCURO)
Cientos de personas se cargaron de energía, en la zona arqueológica de Teotenango, con el encendido del Fuego Nuevo y la entrada de la Primavera. (CUARTOSCURO)
Miles de turistas nacionales y extranjeros se dieron cita en la zona arqueológica de Chichén Itzá para presenciar el espectáculo de Luz y Sombra, conocido como el equinoccio de Primavera, el cual sucede dos veces al año. (CUARTOSCURO/AFP)