CIUDAD DE MEXICO, 8 de abril (EL UNIVERSAL/APRO).- El Presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió que si no hay acuerdo para que avance su propuesta -que deroga la Reforma Educativa-, cancelará dicha contrarreforma y dejarás las cosas como estaban antes del cambio constitucional del 2013.
“Si se llega por el camino del diálogo a un acuerdo extraordinario, si no, voy a proponer la cancelación, voy a cuidar bien de cómo estaba antes la política educativa de la reforma que llevaron a cabo, la mal llamada reforma educativa y voy a dejar las cosas como estaban… Entonces, no sé si de esa manera habría protestas. Creo que no”, aseguró durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.
El presidente López Obrador dijo que tanto los líderes del SNTE, como de la CNTE, pueden tener sus intereses legítimos, pero a él –destacó- le interesa quedar bien con el magisterio nacional.
El titular del Ejecutivo aseguró que busca acabar con la corrupción y los maestros aviadores, porque su gobierno busca la federalización.
“Hay un tema que adelanto, no vamos nosotros a estar de acuerdo, el manejo de la nómina, porque no queremos que haya corrupción, no queremos que haya aviadores, porque vamos hacia la federalización de la educación”.
Sobre las declaraciones de la ex líder del SNTE, Elba Esther Gordillo, de que la reforma propuesta por el gobierno de López Obrador es “la misma gata, pero revolcadita”, el Presidente dijo que la maestra está su derecho de manifestarse y garantizó que en su gobierno habrá democracia sindical.
“Porque hay quienes dicen: ‘vamos a participar’. Adelante, nada más que ya no hay sindicatos predilectos del gobierno, ni partidos predilectos, ni grupos de intereses creados predilectos… Ya estoy reservando mi lugar en primera fila, porque quiero ver las elecciones internas, quiero ver a los maestros votando por primera vez en urnas de manera libre y en secreto, sin acarreos, sin amenazas, con democracia”.
No obstante, en su conferencia de prensa matutina, el presidente dijo que sí hay presiones de algunos dirigentes que quieren sacar provecho de las negociaciones.
En ese sentido, advirtió que la orientación de sus planes se encamina a concentrar la nómina magisterial en el gobierno federal, debido a que identifica falta de capacidades presupuestales de los estados para mantener la nómina y desvío de recursos para fines ajenos a la educación.
El mandatario consideró como un acto de justicia revertir la reforma educativa que surgió del Pacto por México el sexenio pasado, al considerar que fue una política impuesta desde el extranjero con el propósito de desacreditar al magisterio.
Asimismo, se refirió a la democracia sindical y hasta dijo que estaba apartando su asiento en primera fila para ver cómo votan los maestros en urna y por voto universal, sin presiones ni favoritos del gobierno.
Añadió que fortalecerá las normales y fue insistente en declarar que buscará la dignificación del magisterio.
Respecto a las negociaciones para la reforma educativa, concluyó:
“Sí vamos a llegar al acuerdo con los maestros, es cosa de tener paciencia y dialogar mucho”.