“De verdad pensé que me iba a pasar lo peor. Recorrió calles que yo no conocía y solo le pedía que me bajara, que mis papás me recogerían en ese punto pero el insistía e insistía que no me podía bajar”, relató la joven en su cuenta de Facebook.
Saltillo, Coahuila, 28 de julio (Vanguardia).- Una noche de terror fue la que vivió una joven saltillense la madrugada de ayer, cuando al solicitar un Uber , arribó un vehículo similar al de su servicio al cual subió sin percatarse, minutos después cuando se dio cuenta de la equivocación pidió al conductor la dejara bajar y este se negaba , fue hasta que el chofer se percató que sus padres llamaban y seguían su ubicación cuando se detuvo y la joven huyó.
A través de su cuenta de Facebook, Perla dio a conocer la situación en la que se vio envuelta y de la que por fortuna corrió con suerte.
“La noche de ayer pedí un Uber a casa de mi bff (mejor amigo) normalmente me muevo en Uber, In Driver y así con esto quiero aclarar que no es nuevo para mí utilizar estas aplicaciones. Total me marca la hora de llegada y veo un carro BLANCO (como me marcaba la aplicación) fuera de la casa de mi amigo y veo otro más lejos, mi lógica (y estupidez) decidí subirme al que se encontraba más cerca” reveló.
“Después de 1-2 minutos de viaje me entra una llamada diciéndome estoy aquí, ¿dónde se encuentra señorita? Uff amigos no saben el miedo que me dio”.
En ese momento comenzó a buscar ayuda mediante mensajes a sus amigos y familiares, disimuladamente le preguntó al chofer que si podía repetir la dirección a donde se dirigían y dijo una totalmente distinta a la que ella solicitó en la plataforma, el hombre sabía su nombre.
“De verdad pensé que me iba a pasar lo peor. Recorrió calles que yo no conocía y solo le pedía que me bajara, que mis papás me recogerían en ese punto pero el insistía e insistía que no me podía bajar”.
Para entonces, sus padres seguían su ubicación en tiempo real y sus amigos llamaban constantemente, Perla lloraba aterrada.
LA DEJA BAJAR AL VERLA ALTERADA
Fue cuando el hombre se percató de lo alterada que estaba y decidió detenerse.
“De verdad no saben lo agradecida que me siento de estar escribiendo desde mi cama y con mis papás aquí. No puedo imaginar todas esas chavas y chavos que igual de confiados que yo se suben a un Uber y ya nunca más regresan a sus casas”.
Indico que el hombre tiene una imagen de entre 40 y 50 años, el vehículo era un Toyota blanco del cual no distinguió las placas.
“No sé cómo supo mi nombre, no sé cómo llegó a casa de mi amigo, y no se muchas cosas”, mencionó.
Llamó a todas las mujeres a extremar precauciones para no ser víctimas de este tipo de situaciones pues podrían terminar en una tragedia.