CIUDAD DE MEXICO, 15 de septiembre (Eje Central/Sin Embargo/EL UNIVERSAL).- Ante un Zócalo repleto, el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador encabezó desde Palacio Nacional la ceremonia por el 209 aniversario del inicio de la lucha de Independencia.
Solamente acompañado de su esposa Beatriz Gutiérrez, sin invitados ni funcionarios públicos, el mandatario se asomó al balcón para recibir a los cientos de asistentes a la plancha.
Ante las casi 130 mil personas que se dieron cita para el evento en el primer cuadro de la capital, López Obrador lanzó veinte arengas por los héroes que lucharon y entregaron su vida para lograr la independencia de España, además hizo mención del pueblo que se entregó a esta causa.
Además de los tradicionales vivas en honor a los héroes patrios, como Miguel Hidalgo, José María Morelos, Ignacio Allende y la Corregidora Josefa Ortiz de Domínguez, López Obrador lanzó arengas a favor de los héroes anónimos, al pueblo mexicano, a las comunidades indígenas, así como por la democracia, la fraternidad, la libertad, la justicia, la soberanía y la grandeza cultural de México.
Acompañado por su esposa, Beatriz Gutiérrez Müeller, después de dar el Grito de Independencia y tocar la campana, se escuchó el Himno Nacional y el mandatario federal disfrutó desde el balcón el espectáculo de fuegos artificiales.
Al grito de “¡Sí se pudo, sí se pudo!» y «Es un honor estar con Obrador”, miles de personas celebraron el primer grito de Independencia del sexenio lopezobradorista, quien desde el balcón se mostraba sumamente contento.
“Sí se pudo”
Hace apenas un año, en las calles aledañas al Zócalo capitalino, las labores de llegada y entrada de gente acaparaban la atención: eran filas largas para verificar que tuvieran la invitación que los acreditaba como gratos a la fiesta del Presidente Enrique Peña Nieto. Esa imagen de hace un año fue el retrato de todo un sexenio. Un año después, estas calles parecen haber despedido ya los detectores de metales y las revisiones del Estado Mayor Presidencial.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador llegó a su primer Grito de Independencia con una gran aprobación de la población y se hizo evidente en el festejo de este año y aunque por otro lado arrastra críticas y también impaciencia justificada ante la falta de resultados, el hecho es que este 15 de septiembre encabezó la ceremonia el primer Presidente de Izquierda.
En punto de las 22:58 horas, el Presidente López Obrador caminó junto a su esposa hacia el balcón central de Palacio Nacional, recibió la Bandera Nacional y se asomó hacia la explanada del Zócalo capitalino.
En esta ocasión, a diferencia de otros sexenios, no había invitados esperando a la pareja presidencial para verla recorrer el camino hasta llegar al balcón. Los pasillos lucían vacíos. Solamente el Mandatario federal, su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, y la escolta de militares.
A las 22:59 horas, la gente comenzó a gritar cuando vieron asomarse a Andrés Manuel y comenzaron las arengas:
“Viva la Independencia. Viva Miguel Hidalgo. Viva José María Morelos y Pavón. Viva Josefa Ortiz de Domínguez. Vive Ignacio Allende. Viva Leona Vicario. Vivan las madres y los padres de nuestra patria”.
“Vivan los héroes anónimos. Viva el heroico pueblo de México. Vivan las comunidades indígenas. Viva la libertad. Viva la justicia. Viva la democracia. Viva nuestra soberanía. Viva la fraternidad universal. Viva la paz. Viva nuestra riqueza cultural de México. Viva México. Viva México. Viva México”, gritó el Presidente ante miles de personas congregadas en la Plaza de la Constitución para celebrar el 209 aniversario del inicio de la Independencia de México.
El Presidente lanzó 20 vivas y los asistentes que llenaron el Zócalo le respondieron con vivas y gritos de: “No estás solo”, “Si se pudo”, “Presidente”.
Ningún invitado estuvo de su lado derecho, sólo del otro lado salieron el Canciller Marcelo Ebrard y el titular de Hacienda, Arturo Herrera, cada uno con sus esposas. En el siguiente, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum y el presidente de la SCJN, Arturo Zaldívar.
Después del himno vinieron los cohetes y la música que apagó el grito de “No estás solo”.
Desde dos horas antes del Grito, el equipo de López Obrador pudo presumir que el Zócalo estaba lleno. De acuerdo con el C5 de la Ciudad de México, en la explanada del Zócalo capitalina se reunieron 130 mil personas para presenciar el primer Grito de Independencia del Ejecutivo federal.
La fiesta en el Zócalo
Previo a la ceremonia, cada estado desfiló por el escenario puesto frente a Catedral y la atención y recibimiento fueron buenos.
En los espacios la gente comenzó a cantar el Cielito Lindo, ya viendo hacia el balcón central de Palacio Nacional, ya resguardado por elementos de la Guardia Nacional y elementos de lo que fue el Estado Mayor Presidencial. Eduardo, visitante del Estado de México, consideró que “desde la entrada de zapatistas y villistas” el centro del país no estaba “tan cercano a la raza” y agregó que después de tantos años, el Zócalo “por fin volvía a ser nuestro”.
A las 22:30 horas, a unos minutos de empezar la ceremonia, la gente comenzó a gritar “Sí se pudo” y recordó el camino de 12 años de López Obrador para llegar a la Presidencia.
Hubo gritos y aplausos cuando las luces dentro de Palacio se encendieron, hubo más cuando la ventana central se abrió y colocaron el micrófono y el templete.