CIUDAD DE MEXICO, 21 de enero (NTX).- El titular de la Secretaría de Relaciones (SRE), Marcelo Ebrard, descartó que exista una crisis o emergencia migratoria y aseguró que México mantendrá la política que en esta materia marca la ley, y que se ha puesto en marcha en la frontera sur.
“No hay una emergencia, pasa cada año en enero, el año pasado también y eso es porque hay una procesión de Esquipulas -municipio- en Guatemala, por lo menos en los últimos siete años se han organizado cosas similares, a veces con más o menos personas, varía también el origen, por eso en este caso casi el 80 por ciento es Honduras, Honduras, Honduras, del Salvador hay muy pocos, en cambio el año pasado era diferente. Entonces cada año sucede lo mismo”, aseguró Ebrard en conferencia de prensa.
Esto, luego de que desde el pasado 18 de enero, caravanas migrantes comenzaron a llegar a la frontera entre Guatemala y Chiapas, y que este lunes se registraron roces entre un grupo de centroamericanos y elementos de la Guardia Nacional.
Al respecto, Ebrard dijo a los medios de comunicación que la actuación de los elementos fue apegada a los derechos humanos y explicó los hechos.
El canciller defendió el despliegue y la actuación de la Guardia Nacional para frenar y arrestar a los migrantes que entraron ayer por la frontera sur: tras sostener que el cuerpo de seguridad “se comportó según sus ordenamientos”, celebró que “no tenemos heridos” ni “una situación que lamentar”, y afirmó que “se evitó una tragedia”.
“A pesar de las pedradas que se recibieron y de una situación muy difícil, podemos decir que si alguien quería provocar no logró su cometido; si alguien buscaba violencia en México, no la va a encontrar por parte de las autoridades; tenemos que cumplir con los ordenamientos legales”, dijo.
“Desde el día sábado llegaron diferentes grupos, tanto a la frontera de la zona de Tapachula (Chiapas) como a lo que se denomina El Ceibo (Tenosique, Tabasco) que es otro punto de entrada a México. Sábado y domingo, esos contingentes que son aproximadamente dos mil 500 personas, de manera ordenado se les ofrecido por parte los autoridades migratorias los diferentes estatus legales que pueden tener en México, refugio, permiso temporal para trabajar en el país incorporarse al programa de bienestar, o bien en su caso el retorno asistido”, afirmó.
El canciller señaló que también se les explicó a las personas migrantes la posibilidad de que trabajen en sus países de origen en los programas de empleo que México ha financiado en sus países de origen; pese a esto dijo que un grupo de mil personas quiso entrar a la fuerza a México.
“Una parte de ese grupo decidió intentar entrar por la fuerza al territorio mexicano, es decir darle la vuelta a las autoridades. Debo decir que la Guardia Nacional se comportó conforme a los ordenamientos que se le han dado y por fortuna no tenemos heridos, no tenemos una situación que lamentar”.
Aseguró que pese “a las pedradas que se dieron y de una estación muy tensa” las autoridades actuaran de manera sensata y razonable, pero con firmeza para cumplir el mandato legal en la materia.
“El día de hoy vamos a seguir dialogando, vamos a seguir proponiendo por parte del Instituto Nacional de Migración y de otras autoridades, porque insisto hay la opción de refugio, de trabajo temporal y a todos hay que tratarlos con respeto a sus derechos humanos y esa va ser la posición de México. Hoy no sabemos si vaya a llegar otro contingente y si así fuera pues tendremos el mismo tipo de respuesta y el mismo tipo de posición”, indicó.
El canciller estuvo acompañado por la titular de la Secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero quien explicó que la actuación de las autoridades está apegada a al Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular que se estableció en Marrakech, Marruecos en 2018.
“México fue uno de los primero países que suscribió el Pacto de Marrakech y este es muy específico y categórico: la migración tiene que ser ordenada, tiene que ser segura y tiene que ser regular, ¿qué significa regular?, acatar las normativas de cada país, y en su caso aplicar la ley, es lo que estamos haciendo para que (los migrantes) tengan seguridad y el respeto irrestricto a sus derechos humanos”, afirmó la secretaria.