Mientras años anteriores las personas buscaban contraer matrimonio con sus parejas en el día de San Valentín debido a que es una fecha conmemorativa del día del Amor y la Amistad, en estos últimos años, los jóvenes prefieren no contraer nupcias y compartir el techo y gastos sin necesidad de papeleo.
Los jóvenes de la época mejor conocidos como millennials no se conforman con los paradigmas sociales pre- establecidos, marchan a su propio ritmo y es por ello que han creado nuevos caminos hacia el matrimonio posponiéndolos o abandonándolos por completo con tal de cumplir sus metas.
En el 2018 según cifras el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) el promedio de edad de las personas que contrajeron matrimonio fue entre los 35 años, cifra que cada vez más va en aumento.
Los adultos que ya han llegado a la edad en la que sus padres o abuelos se casaron no tienen en mente hacerlo a tan temprana edad, ya que es un gasto innecesario para su bolsillo.
Mientras que las pajeras homosexuales luchan por conquistar en algunos estados el derecho al matrimonio y la adopción, las parejas heterosexuales optan por vivir en concubinato sin hijos y papeles de por medio, con el fin de tener cierta libertad para actuar en situaciones de su vida.
Por Redacción Digital Por Esto!