México

Podría AMLO recurrir a deuda pública: Padierna

CIUDAD DE MEXICO, 12 de abril (El Economista).- La vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Dolores Padierna, aseguró que ante la emergencia sanitaria por COVID-19, el presidente Andrés Manuel López Obrador no descarta recurrir a la deuda pública como último recurso.

La diputada federal de Morena recalcó que primero deben agotarse otras posibilidades, cuantificar las acciones que aún faltan de realizar e identificar varias fuentes de financiamiento disponibles antes de recurrir a esta medida.

Asimismo, dijo que en situaciones de emergencia económica, el endeudamiento es una opción que utilizan casi todos los países, pero no todos tienen la misma capacidad para contratar deuda en condiciones sostenibles, ya que implica necesariamente un incremento futuro del costo financiero.

Recordó que durante la administración pasada, la deuda pública se incrementó al pasar de 33.8% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2012 al 48.2% en 2016. A partir de 2017, agregó, se modificó la política de endeudamiento y se logró disminuir a 46.1% e indicó que durante el primer año de la actual administración la deuda se redujo a 45.5 por ciento.

Padierna Luna señaló que el incremento de la deuda trajo como consecuencia que su costo financiero pasara de 1.9 a 2.7% del PIB entre 2012 y 2019 y se tuviera que destinar en 2019 el 12.4% de los ingresos presupuestales, más del 8.7% que se destinaron en 2012.

Expuso que en el paquete fiscal de 2020 se consideró un escenario de disminución paulatina de la deuda hasta llegar al 43.9% en 2024, con lo que se reduciría su costo a 2.6% del PIB y al 12.0% de los ingresos.

Recordó que en los Pre-Criterios Generales de Política Económica 2021 que presentó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) en abril, para 2020 se estima una reducción de los ingresos de 586,000 millones de pesos.

La legisladora federal refirió que para compensar la caída de los ingresos se ha propuesto utilizar 289,000 millones de pesos de recursos disponibles en fideicomisos públicos, principalmente del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestales (FEIP) y las coberturas petroleras y 259,000 millones de pesos de nuevos endeudamientos, lo que incrementará la deuda neta del 45.8% del PIB aprobado a 52.5 por ciento.