México

NO habrá otro Plan

CIUDAD DE MEXICO, 6 de abril (SinEmbargo/NTX/EL UNIVERSAL).- Ante las críticas por su plan de reactivación de la economía, el Presidente Andrés Manuel López Obrador defendió el proyecto y afirmó que aquellos que lo cuestionan sólo buscan el “banderazo de salida” para restaurar la corrupción en el país.

Durante su conferencia matutina, el Jefe del Ejecutivo señaló que sería absurdo regresar a las prácticas del pasado, pues, afirmó, el coronavirus sólo precipitó el derrumbe de la política neoliberal no exclusivamente en México, sino en todo el mundo. “Por eso algunos dicen: ¿dónde está el plan para reactivar la economía? Porque lo que quieren es un ‘banderazo de salida’ para de nuevo instaurar la corrupción en México y eso no, fui muy claro ayer”, explicó el primer mandatario.

“Consideramos que pronto se va a reactivar la economía, es un nuevo modelo, no podemos seguir con lo mismo porque sería entre otras cosas un absurdo, el coronavirus lo que precipitó fue el derrumbe del modelo neoliberal en el mundo, eso ya no funciona, es otra realidad”, agregó.

Asimismo, el tabasqueño insistió en que su Gobierno no aplicará la misma política económica que llevó a la crisis y a la decadencia en administraciones anteriores, y prueba de ello es el Plan Nacional de Desarrollo.

“Nosotros nos adelantamos, ya sabíamos, esto es lo que está en el Plan Nacional de Desarrollo, no es algo nuevo, es profundizar lo que ya está en el Plan Nacional de Desarrollo porque nosotros, no lo olviden, dijimos que ya no íbamos a seguir aplicando la misma política económica que una y otra vez ha fracasado y que nos llevó a esta crisis, a la decadencia”, asintió.

“Nosotros estamos pensando, incluso, que va a ser un modelo a seguir para otros países porque lo que estoy viendo es que se está derrumbando el modelo neoliberal, que eso es lo que está pasando, o sea, el coronavirus precipitó la caída de un modelo fallido”, aseveró en su rueda de prensa matutina.

El Presidente advirtió que el plan que presentó el domingo es objeto de críticas por parte de sus opositores ya que rompe con el modelo neoliberal que privilegiaba a los adinerados y excluía a los más vulnerables.

Reconoció que el pueblo entiende perfectamente su plan, por lo que agradeció su apoyo. Además, ensalzó los esfuerzos de la gente por mantenerse en casa: ““El pueblo Cuidándose asimismo, el pueblo cuida al pueblo”.

El Mandatario señaló que justicia es darle más al que tiene menos tiene porque “no puede haber trato igual entre desiguales, no podemos estar pensando nada más en los de arriba y darle la espalda a los de abajo”.

El Presidente insistió que su plan contempla apoyar a 22 millones de beneficiarios de programas sociales y la creación de dos millones de nuevos empleos, para lo que seguirá con la construcción de sus grandes proyectos de infraestructura, como el Tren Maya y el nuevo aeropuerto de Ciudad de México.

También reiteró que habrá 2.1 millones de créditos para vivienda y pequeños negocios, de los que 1 millón sumarán un total de 25 mil millones de pesos (unos mil millones de dólares) para apoyar a pequeños empresarios formales y unidades económicas informales.

Asimismo, reafirmó que obtendrá 150 mil millones de pesos (6 mil 053 millones de dólares) de la cancelación de fideicomisos públicos y tres mil millones de pesos (121 millones de dólares) de la reducción de salarios y aguinaldos de funcionarios públicos de alto nivel.

“Ahora el Gobierno se está apretando el cinturón”, dijo.

Rechaza incentivos fiscales

El Mandatario cuestionó a los críticos de su plan económico al acusarlos de querer las “recetas del periodo neoliberal”.

Por ello, rechazó aplicar medidas adoptadas por otros países, como los incentivos fiscales que piden las empresas mexicanas.

Al indicar que la recaudación tributaria subió ocho por ciento en el primer trimestre del 2020 comparado con el mismo periodo del año anterior, el presidente explicó que interrumpir el cobro de impuestos impediría apoyar a los más pobres.

“No va a haber privilegios fiscales, no va a haber condonación de impuestos, no va a haber rescate a grandes empresas, bancos. No va a haber rescate en general, mucho menos para los grandes. El rescate es al pueblo de México”, justificó.

López Obrador le planteó a Larry Fink, presidente de BlackRock, un plan de apoyo económico similar al Plan Marshall de finales de los años 40. El mecanismo de recuperación se aplicaría a los países más golpeados por el brote de coronavirus.

“Le planteé que se requiere un plan de apoyo a los países en vías de desarrollo, las economías emergentes y sobre todo para los países pobres, se requiere una especie de Plan Marshall”, dijo el Mandatario durante su conferencia.

Explicó que el banquero, presidente de la mayor administradora de activos del planeta, coincidió en que la Organización de las Naciones Unidas no está interviniendo lo suficiente para asegurar un reparto equitativo de medicinas y equipos médicos, también por la supuesta falta de responsabilidad de los actores de la economía global.

La petición del Presidente López Obrador se produjo el sábado cuando sostuvieron una conversación virtual sobre cómo actuar frente a la expansión del COVID-19 y la crisis económica y financiera, en el marco del concierto de las naciones.

El llamado Plan Marshall fue una iniciativa de Estados Unidos para ayudar a Europa Occidental a recuperarse de los estragos dejados tras la Segunda Guerra Mundial.

El Mandatario informó del diálogo que sostuvo con Larry Fink en sus redes sociales y precisó que tuvo lugar mediante una videollamada. En el encuentro también participó el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.