México

CIUDAD DE MÉXICO, 7 de abril (EL UNIVERSAL / SinEmbargo).- Ante la negativa del Gobierno federal de tomar en cuenta el plan de acción del sector privado, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar, convocó a todos los organismos, cámaras, asociaciones del sector productivo a hacer un Acuerdo Nacional junto con los trabajadores para enfrentar la crisis causada por el COVID-19.

El líder del CCE dijo que sin un programa de rescate gubernamental, el panorama es tener un decrecimiento de entre 7% y 10%; entre 800 mil a 1 millón de desempleados; un tipo de cambio de 25 pesos por dólar y una inflación de entre 6% a 10%. Refirió que de haberse aceptado la cifras de caída económica serían de -2.5%; una paridad peso dólar de entre 21 a 22 pesos por divisa; y entre 300 mil a 400 mil desempleados.

Salazar afirmó que ellos presentaron al presidente Andrés Manuel López Obrador un plan de acción a 90 días que no quiso tomar en cuenta el mandatario y que consistió en: Proteger el empleo, los salarios y los ingresos de las familias; sentar las bases para una recuperación inmediata; evitar que la crisis de liquidez de familias y empresas se convierta en una de solvencia.

En videoconferencia con líderes de organizaciones de diversos sectores productivos, afirmó que está claro que si la economía se frena, también se pausarán los cobros en el sector privado, del gobierno y no se contará con recursos para continuar programas sociales actuales.

Por ello, dijo que seguirán insistiendo en que se concrete un mecanismo de implementación para que el sector privado, la sociedad, el gobierno y los sindicatos tengan un convenio, y que este se convierta en un Consejo Económico Permanente.

Explicó que para evitar una crisis más profunda era necesario que el gobierno diera créditos mensuales de 25 mil pesos, que tendrían un costo de 75 mil millones de pesos para una cobertura de 3 millones de personas, cuyo único requisito iba a ser que se formalizara el beneficiario.

Explicó que se planteó “utilizar la caja actual del sector público y cambiar concepto de deuda neta por deuda bruta. Esto libera 425 mil millones de pesos; uso de fondos de estabilización por un total de 243 mil millones de pesos”.

Además de postergar el objetivo de finanzas públicas del 2020, a fin de incrementar el endeudamiento 4% del PIB, con lo que se podría hacer frente a los gastos de salud, compensar caídas de ingresos y sentar las bases de la recuperación.

Además de que propuso sustituir importaciones, sobre todo en los sectores ligados al comercio exterior; tener un programa de infraestructura con fondos públicos y privados; dar una definición y anuncio inmediato de los proyectos de inversión privada en infraestructura energética y permitir la depreciación acelerada de nuevas inversiones.

2 millones de empleos son “irreales”

Carlos Salazar Lomelí dijo que es un plan incompleto y que el Gobierno tiene oídos sordos. Alertó que más de un millón de empleos se perderán y que la caída del PIB llegará a un 10 por ciento.

Contrario a lo que dijo esta mañana el Presidente Andrés Manuel López Obrador sobre el apoyo de los empresarios, Salazar Lomelí acusó al Gobierno federal de no escuchar a los empresarios, ni sus planteamientos, como el que hicieron en un decálogo presentado al Jefe del Estado mexicano en el que solicitaban el retraso de pagos de impuestos, entre otras medidas.

Ayer, el presidente de la CCE dio una entrevista a Carlos Loret de Mola, en el programa “Así las cosas”, dijo que el plan del Presidente López Obrador le pareció “completamente incompleto”, y afirmó que el Estado no puede hacerlo todo junto.

“Es imposible querer resolver esta problemática aumentando, como se nos dijo el domingo, solamente la inversión pública”, afirmó esta en reunión con más de 3 mil empresarios de todo el país.

También expresó que el problema de empleo y los “dramas” a los que se enfrentará la economía nacional no se pueden lograr sin el apoyo de la inversión privada, que es la principal generadora de puestos de trabajo. “Como se nos dijo, 2 millones de empleos en nueve meses, es totalmente irrealista, no hay realismo”, afirmó.

Desde el domingo el presidente del CCE expresó su inconformidad con el plan de recuperación económica planteado por el Gobierno federal y dijo a medios que para enfrentar la crisis económica que dejará la emergencia sanitaria por el COVID-19 se deberán aplicar otras medidas. En caso de no hacerlo, la economía nacional caerá un 10 por ciento, con una inflación similar y la pérdida de hasta un millón de empleos.

Lomelí Calificó como desgarrador el escenario actual en el que no se ha hecho partícipe su voz en el discurso nacional, “no hemos sido capaces de hacernos oír por nuestras autoridades”, se quejó y anticipó que quienes se han acercado a anticipar la crisis que se avecina sólo han vislumbrado “la punta del iceberg”.