Claudia Sheinbaum, virtual presidenta electa de México, rechazó la propuesta de diálogo con el gobierno ecuatoriano encabezado por Daniel Noboa para restablecer relaciones diplomáticas, subrayando que la agresión cometida contra la embajada mexicana "no es menor".
Esta firme postura se basa en el incidente diplomático que ocurrió en la embajada mexicana en Ecuador, donde Jorge Glas, ex vicepresidente y asilado político, fue sustraído por la fuerza.
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Ecuador convoca a Claudia Sheinbaum a diálogo para reestablecer relaciones con México
Sheinbaum Pardo señaló que la disputa diplomática entre México y Ecuador será resuelta en la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
México ha presentado una demanda contra Ecuador, y este país ha respondido con una contrademanda.
"Hay un juicio, tiene que resolverse ese juicio. Si Ecuador asume lo que está pidiendo México en ese juicio es distinto. Pero tiene que resolverse el juicio", declaró Sheinbaum durante una conferencia de prensa en su casa de transición.
Posición de Ecuador y la respuesta mexicana
La canciller ecuatoriana Gabriela Sommerfeld había expresado anteriormente su disposición a dialogar tanto con el presidente Andrés Manuel López Obrador como con Claudia Sheinbaum.
Sin embargo, la ex jefa de gobierno de la Ciudad de México reiteró la necesidad de una disculpa pública por parte de Ecuador debido a la invasión a la embajada mexicana.
Este acto violó las normas internacionales de asilo diplomático y llevó a una situación de tensión entre ambas naciones.
Rechazo de medidas cautelares por la CIJ
En el contexto de esta disputa, la Corte Internacional de Justicia rechazó imponer medidas cautelares al gobierno de Daniel Noboa, argumentando que no había necesidad de proteger la embajada mexicana.
Este fallo no ha mitigado la postura firme de Sheinbaum ni la exigencia de México por una resolución justa del conflicto.
A medida que se espera la resolución del juicio en la CIJ, las relaciones diplomáticas entre México y Ecuador permanecen en un estado delicado.
La postura de Sheinbaum refleja una firme defensa de la soberanía y el respeto a las leyes internacionales, insistiendo en que cualquier diálogo futuro dependerá del reconocimiento y la rectificación de las acciones cometidas por Ecuador.
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