El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la reforma judicial no afecta los derechos laborales de los trabajadores del Poder Judicial, garantizando sus beneficios y eliminando privilegios indebidos.

El presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a los trabajadores del Poder Judicial que no se dejen engañar por interpretaciones erróneas sobre la reforma judicial, afirmando que esta no afectará sus derechos laborales.

Durante su conferencia de prensa, el mandatario se dirigió a los trabajadores del Poder Judicial, asegurándoles que la reforma no incluye medidas que perjudiquen sus derechos.

El mandatario enfatizó que, por el contrario, la reforma garantizará sus beneficios y buscará erradicar prácticas negativas como el influyentismo, el nepotismo y la corrupción dentro del sistema judicial.

La presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña Hernández, había llamado previamente a los trabajadores del Poder Judicial a defender sus derechos, lo que llevó a López Obrador a aclarar que no tienen nada que temer.

De acurdo con el Ejecutivo federal, la reforma se enfoca en la elección de jueces, magistrados y ministros, y no afectará las prestaciones de los trabajadores.

El presidente reconoció que hay una campaña política en contra de la reforma, pero insistió en que es necesario aclarar la situación para evitar malentendidos.

Aseguró que, si el Congreso decide cancelar los fideicomisos del Poder Judicial, que suman aproximadamente 20 mil millones de pesos, todas las prestaciones de los trabajadores serán garantizadas.

El presidente explicó que los fideicomisos deben eliminarse porque alimentan los privilegios de los altos funcionarios del Poder Judicial, quienes, según él, ganan significativamente más que el presidente, en violación de las disposiciones constitucionales.

“Nadie puede ganar más que el presidente y ellos ganan cinco veces más que el presidente”, añadió.

La reforma judicial propuesta por López Obrador busca una mayor transparencia y eficiencia en la selección de los jueces y magistrados, eliminando prácticas que han afectado la percepción pública sobre la imparcialidad y la justicia en México.

Con esta reforma, el presidente espera fortalecer el sistema judicial, asegurando que sea justo y equitativo para todos los ciudadanos.

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