La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, manifestó su intención de dialogar con el nuevo primer ministro de Canadá, Mark Carney, quien asume el cargo tras la renuncia de Justin Trudeau y el proceso de elección interna del Partido Liberal.
Durante su conferencia matutina, la mandataria recalcó la importancia de sostener el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) como vía para impulsar el desarrollo económico de la región.
Carney asumirá el liderazgo del gobierno canadiense en una ceremonia pública en Ottawa, ante la gobernadora general Mary Simon, quien representa formalmente a la monarquía británica en Canadá.
Este relevo ocurre en un contexto marcado por tensiones comerciales, surgidas a raíz de la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos y las fricciones que generaron dudas sobre el futuro del T-MEC.
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En aquel entonces, Trudeau, junto con otros políticos canadienses, sugirieron la posibilidad de excluir a México y optar por un acuerdo bilateral con Estados Unidos, después de las constantes críticas de Trump contra la relación trilateral.
La postura de la presidenta mexicana se ha mantenido firme: Sheinbaum ha expresado, de manera reiterada, que el T-MEC debe seguir siendo un convenio trilateral que beneficie a los tres países.
Además, ha defendido la relación con Canadá, sobre todo cuando Trump sugirió la anexión de su territorio como el “estado número 51” y se refirió a Trudeau como un “gobernador”.
En este nuevo escenario, Sheinbaum afirmó que la relación con el primer ministro Carney se basará en el respeto y la colaboración, reconociendo el papel de Canadá como un socio comercial clave para México.
La mandataria confía en que el diálogo con el nuevo gobierno canadiense reforzará los lazos trilaterales y garantizará la continuidad del acuerdo comercial, a fin de apuntalar la competitividad y el crecimiento económico en Norteamérica.
IO