A pesar de que el Fondo Nacional de Turismo (Fonatur) se comprometió a pagar indemnizaciones por afectaciones a los predios, además de resolver el tema de las viviendas que deberán ser desalojadas, ejidatarios y posesionarios en Maxcanú no han recibido pago alguno, ni acercamiento por parte de la dependencia, mientras las máquinas siguen avanzando y amenazando su patrimonio, por lo que analizan proceder legalmente.
En este tenor, uno de los afectados que también es abogado, Edgar Hoo Ku, dijo que si este tema no se resuelve de buena manera podrían proceder jurídicamente a través de amparos que con toda seguridad les darían la razón, porque hay gente que puede demostrar que es la legítima dueña de la tierra que tendrían que desalojar con el paso del Tren Maya y que hasta ahora no se han pagado.
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Dijo que luego del descontento que surgió en Maxcanú, otros poblados se han acercado a manifestar problemas similares con el tema de los pagos, como es el caso de Kopomá y también Halachó, por lo que si no se resuelven estos temas de manera satisfactoria es probable que el problema crezca.
Fue el pasado fin de semana cuando un grupo de pobladores que tienen propiedades cerca de la vía del Tren Maya se manifestaron y denunciaron que varios terrenos serán afectados por la vía, incluso predios de propiedad privada, tras lo cual gente de Fonatur se apersonó al lugar y aseguró que se harían los pagos correspondientes y que los casos donde la gente va a tener que deshabitar sus casas, el tema se revisaría junto con ONU-Hábitat.
Entrevistados sobre el tema, mujeres y hombres manifestaron que nada de lo anterior ha pasado. Dijeron que, si bien a algunas personas sí les pagaron, el comisario ejidal José Alfredo Argáez Canul ha hecho comentarios en el sentido de que:
“Esto es lo que hay, cóbralo, es lo que alcanza. No habrá reubicación y ONU-Hábitat ni va a venir”.
Lo anterior mantiene hoy en incertidumbre a los que se ven afectados, como es el caso del señor Amílcar Ceh Cih, quien dijo que en uno de sus predios se ven afectados como 20 metros de malla y postes de concreto, pero 3 lotes más de plano se perderían por el paso de la vía. En este sentido, dijo que no se le ha hecho pago alguno ni ha habido acercamiento, a pesar de ser propiedad privada.
“Yo lo que pido es que, en todo caso, haya una reubicación, pero en un buen lugar, porque no me puedo quedar sin mi patrimonio y no voy a aceptar tampoco que me manden a un lugar que esté alejado”, expuso.
Dijo que una estrategia para atrasar el pago de parte de Fonatur es que les piden títulos de propiedad a los que no los tienen, pero muchos son posesionarios de años.
Doña Georgina de la Cruz Calderón Cauich dijo que, en su caso, tendría que deshabitar su terreno en el que hay tres casitas, una de ella y las otras de sus hijos, porque les han dicho que no pueden permanecer por la cercanía de la vía y porque será un tren de alta velocidad.
“Yo tengo un terreno de 60 por 40 metros y no me han ido a ver, no me han dicho nada, ni pago de afectaciones ni nada”, expuso.
Mientras tanto, los entrevistados mencionaron que las máquinas siguen avanzando y prácticamente están cercando al pueblo, pues trabajan en la carretera que va hacia el municipio y del otro lado también.
Víctor Moo Chan mostró sus papeles de legítimo propietario de un terreno que se verá afectado también, pero a pesar de tener su título de propiedad no le han hecho pago alguno y al parecer no hay la intención.
“Mi terreno no afecta y respeta los diez metros del derecho de vía, pero que me paguen los otros 10 metros que me va a afectar, pero no me quieren hacer valer mi escritura, sólo para no pagarme”, expuso.
En su caso, dijo que el tren le afecta una extensión de 130 metros por 10, pero también está en total incertidumbre.
Hoo Ku aseguró que hay más gente sumándose a la inconformidad, que tienen la posesión de sus predios y también títulos de propiedad.
Además, dijo que hay gente afectada a la que incluso el actual comisario y el anterior les iniciaron procesos de “regularización” y hay recibos de pagos que se hicieron para este fin.
“Lo grave aquí es que la gente sigue con incertidumbre, incluso los que tienen escrituras, por lo que demandamos que este tema se resuelva ya, porque las obras siguen su curso, siguen avanzando”, expuso.
Por David Rico