Alrededor de una decena de personas que aceptaron el convenio de relocalización por el paso del Proyecto del Tren Maya en Candelaria el pasado 27 de julio se quejaron de las dimensiones y materiales de las viviendas que serán construidas en una zona habitacional en esta cabecera municipal, lugar que por el momento no ha sido confirmado.
Durante la presentación del diseño de las viviendas, el grupo de personas inconformes -que omitieron sus nombres- protestaron ante el personal del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) y del Consejo Nacional de Vivienda (Conavi) al no estar de acuerdo con el tipo de vivienda que les serán otorgadas, ya que al parecer sus anteriores viviendas estaban mejor construidas.
Los afectados señalaron que el tipo de material y el modelo que será utilizado en la construcción de las nuevas viviendas son pocos comunes y utilizados en la región -los cuales son bloques y aluminio reciclado de los antiguos rieles de las vías del tren-, ya que consideran que son de mala calidad y abaratan el valor de sus viviendas; incluso, agregaron que algunos de los domicilios desalojados tienen un mayor precio que el de los entregados por Fonatur.
“En la capital del estado las casas entregadas son diferentes a las que se nos quieren entregar y esto genera descontento en nuestra persona”, aseguró uno de los labriegos presentes.
Dijeron que, si desde un principio antes de llegar al convenio firmado hubieran realizado la presentación de estos modelos, seguramente no habrían aceptado y así hubiera tenido la oportunidad de buscar otra opción.
Cabe señalar que, de acuerdo a lo establecido por Fonatur, los ejidatarios podían recibir la indemnización para comprar la vivienda de su elección, o tomar las ofertadas por la dependencia.
Mientras tanto, los afectados manifestaron que no aceptarán este tipo de construcción, a menos que las viviendas sean construidas con los mismos materiales que fueron construidos en la capital del estado.
Por su parte, el personal de Conavi realizó una explicación detallada sobre los materiales de construcción y los beneficios de los mismos, pues aunque las viviendas mantendrá un diseño diferente, “está garantizado la vida útil de 100 años acorde a las condiciones climatología de la región” dijeron a los inconformes.
Mencionaron que estas viviendas estarán diseñadas para aprovechar al máximo las condiciones de la región, dichas casas serán también construidas con el material reciclado de las vías del ferrocarril, pues las trabes y castillos no serán de concreto hidráulico, sino de los rieles de los exvías del ferrocarril.
Cabe destacar que son al menos 150 personas que están contempladas dentro del padrón de beneficiarios que recibirán una vivienda digna, de los cuales 100 ya aceptaron el convenio de reubicación, el resto de los censados se encuentran en dicho proceso y determinar su aceptan la relocalización o prefieren el pago de indemnización.
Al final de la presentación de los cerca de 80 personas que asistieron a la reunión la mayoría firmó la minuta de trabajo y la aceptación del proyecto, mientras que un reducido grupo se abstuvo a la firma del documento.
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JG