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México / Tren Maya

El ruido de tráfico, las vibraciones y la contaminación afectan el habitan de más de 94 especies de animales por el paso del Tren Maya en la Península de Yucatá, Tabasco y Chiapas

El megaproyecto del Tren Maya, impulsado por la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, pone en riesgo al medio ambiente y, particularmente, la fauna de la región en donde se pretende establecer pues en ella habitan al menos 94 especies de animales que actualmente son catalogadas como prioritarias para la conservación por la Ley General de Vida Silvestre, de las cuales 31 están en peligro de extinción, destaca el informe de la agrupación Serendipia.

En el texto “¿Cómo afecta el Tren Maya al medio ambiente?”, la agrupación destaca que este proyecto abarca mil 500 kilómetros en los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, y entre las consecuencias que traerá son la fragmentación del territorio y por ende amenaza la vida de especies como el jaguar, el mono aullador, tapir, murciélagos, entre otras, y los pasos de fauna que se consideran no son la solución ni suficientes.

Señala que el proyecto fragmentará, contaminará y desequilibrará todavía más los ecosistemas de la región. Estos cambios en el medio ambiente impactarán negativamente en la fauna de la región de maneras que ni el crecimiento económico, ni la generación de empleos podrán contrarrestar si no se toman las medidas necesarias para evitarlo y mitigarlo.

De la fragmentación, se expone que los vehículos y trenes que transitan en vías de comunicación terrestres impiden el desplazamiento de los animales hacia el otro lado de la vía, pero cuando estos intentan atravesar la vía pueden ser atropellados y asesinados.

Añade que, en el caso de las vías de comunicación del Tren Maya, el de pasajeros y de carga correrán a 160 kilómetros por hora y 100 kilómetros respectivamente.

Para evitar atropellamientos se construirá una cerca perimetral a cada lado de la vía férrea. Es decir, el Tren Maya será como una malla que encapsulará a la fauna, con lo que las condiciones de vida y las oportunidades de reproducción disminuirían.

Además, expone que varias investigaciones sobre el efecto del ruido de tráfico, las vibraciones y la contaminación química generados por las vías férreas han arrojado que estos componentes mantienen alejada a la fauna de los sitios perturbados, restringiendo su hábitat y zona de movimiento. Esta barrera creada por el ruido puede presentarse durante la construcción y operación del proyecto Tren Maya, de acuerdo con el libro de ECOSUR sobre el tema.

Entonces, tanto la vía como la malla perimetral y el ruido del transporte férreo romperán el hábitat de especies prioritarias para la conservación y dividirán los ecosistemas de la zona.

Parte de la solución que ha planteado el proyecto es la construcción de pasos de fauna que según la información del 2020 el Tren Maya tendrá 63 accesos de fauna grande y dos mil 16 metros de pasos para pequeños vertebrados en los primeros tres tramos.

Menciona que Serendipia sólo localizó 40 pasos de fauna para los primeros tres tramos del Tren Maya mencionados en la Manifestación de Impacto Ambiental de la fase uno del proyecto entregada a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) el 16 de junio de 2020 y aprobada el 30 de noviembre.

Estos 40 pasos de fauna se construirán a lo largo de 631.25 kilómetros, entre ellos habrá pasos inferiores para grandes mamíferos, específicos para pequeños vertebrados, pasos entre árboles para mamíferos que viven en los árboles y pasos para anfibios, pero esos accesos de fauna no son suficientes.

Una de las poblaciones de mamíferos afectada será la de los jaguares pues están repartidas a lo largo de los cinco estados por los que atravesará el Tren Maya y aunque están separadas entre sí, las comunidades de dichos animales se mueven de un lugar a otro a través de áreas de vegetación en buen estado de conservación, por lo que todas las poblaciones de jaguar están conectadas entre sí.

De esta forma, la población de jaguar que vive en Guatemala está conectada con la población que habita en la “Reserva de la Biosfera de Calakmul” en Campeche, y esta a su vez viaja a través del corredor biológico “Calakmul – Bala’an K’aax” hasta el otro extremo de Campeche, al Área Natural Protegida (ANP) “Laguna de Términos”.

Pero este recorrido se verá afectado por el Tren Maya: la vía cercada de la obra pasará justo entre de la “Reserva de la Biosfera de Calakmul” y la ANP “Laguna de Términos”, dejando una barrera entre el hábitat de los jaguares.

También, amenaza de manera particular a las múltiples especies de murciélagos que habitan la cueva “El volcán de los murciélagos”, uno de los refugios para estos animales más importantes en el trópico mexicano debido a que pasará frente a ella, justo en la ruta de vuelo de los murciélagos.

La cueva se ubica dentro de la zona sujeta a conservación ecológica Balam-kú (en Calakmul, Campeche) y está clasificada como un refugio multiespecie de alta abundancia de murciélagos porque aloja a ocho especies insectívoras y una nectívora que en total suman tres millones de individuos.

Además de la amenaza de atropellamiento, el Tren Maya pondrá en peligro la integridad de la cueva con el aumento de ruido y vibraciones del tren rápido porque el sitio ya ha tenido problemas de derrumbes y su trayectoria bajo el subsuelo va en dirección hacia la carretera.

Añade que pasos de fauna planeados tendrán una separación entre sí que irá de un kilómetro a 500 metros, dependiendo el tipo de vegetación y uso de suelo de la zona donde serán construidos, de acuerdo con la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del proyecto. Esto no representará un problema para animales como el jaguar, pero otras especies pueden tener dificultades para utilizarlos.

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Dada la biodiversidad del Sureste de México, el Tren Maya tendrá diferentes tipos de pasos de fauna: para animales grandes, pequeños, para anfibios y para especies que viven en árboles. Estos últimos, los especiales para animales arborícolas son distintos a los anteriores porque estos requieren que la fauna como el mono aullador negro y el mono araña se muevan a través de rodales de vegetación en lugar de puentes al ras del suelo o subterráneos.

GH

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