La Lucha por la Igualdad de las Mujeres

Víctor Flores Olea

Como es sabido, el día 8 de marzo de cada año se celebra el Día Internacional de la Mujer. Naturalmente, también en México y en otros países latinoamericanos. En México, en ese día, el Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador propuso que los temas más polémicos relacionados con los derechos de las mujeres se lleven a consulta pública. En el patio central de Palacio Nacional fueron convocadas más de trescientas mujeres a un desayuno para conocer la postura del mandatario y de su gobierno, en el ámbito de las garantías para respetar la dignidad de género.

Millones de personas en todo el mundo han celebrado el Día Internacional de la Mujer al exigir un mundo con equilibrio de género, en medio de la brecha salarial persistente, la violencia y la desigualdad generalizada. En su exposición, Andrés Manuel López Obrador convocó a todas las expresiones femeninas a coincidir en una postura tendiente a resolver sus demandas centrales de inclusión, fin de la violencia, aplicación de normas que les garanticen derechos y respeto a su dignidad.

Antes de la intervención de López Obrador participaron en el acto la directora del Instituto Nacional de las Mujeres, Nadine Gassman, la estudiante de la secundaria 123, Ana Regina Flores, y la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero. En el Día Internacional de la Mujer, López Obrador exigió también un mundo con equilibrio de género en medio de la brecha salarial persistente, la violencia y la desigualdad generalizadas. López Obrador convocó a todas las mujeres del país a coincidir en tales demandas primordiales.

El Presidente hizo un recuento de las acciones iniciales de su gobierno para respaldar la defensa de los derechos de las mujeres. También consideró que en la Cuarta Transformación el respeto irrestricto a las mujeres prevalecerá como norma y conducta diaria. Entonces propuso que todas las expresiones y grupos de mujeres participen en un solo esfuerzo que les garantice la solución de sus ancestrales problemas, ligados a la discriminación y a la violencia.

Fue Nadine Gassman quien expuso que las mujeres continúan padeciendo la discriminación laboral: despidos por embarazo, salarios menores por trabajos del mismo valor que los hombres, siendo aún las responsables casi exclusivas de las cargas del trabajo doméstico y de cuidados no remunerados.

Lamentablemente, en México no sólo existe dicho margen, sino que la criminalización por esta causa constituye una lacerante realidad: entre 2007 y 2016 al menos una persona fue denunciada cada día por aborto, y al menos 300 se encuentran presas por este motivo. Tal situación es un atraso vergonzoso de la civilización, ya que se utiliza la ley para imponer una moral religiosa individual sobre la vida social. El derecho a decidir sobre el propio cuerpo en términos legales e institucionales, no corresponde a la moral sino a la salud pública y al esfuerzo del Estado por evitar crueles penas de prisión, así como todo tipo de lesiones, en no pocos casos mortales, a las mujeres que decidan o necesiten poner fin a un embarazo.

Debe pugnarse, en suma, por que se plasme de manera inequívoca en las leyes federales el derecho a decidir, para lo cual hay ya cuatro iniciativas presentadas en la Cámara de Diputados el año pasado. En caso contrario, el país seguirá partido en dos, con una capital donde hace más de una década se estableció la plena vigencia de los derechos de las mujeres, y con 18 entidades que todavía criminalizan por ejercerlos.

A más de 100 años de que se instaurara un día para conmemorar a las mujeres, y de que en 1975 la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declarara el 8 de marzo como la fecha internacional para tal fin, los avances en cuanto a la igualdad de derechos han sido demasiados lentos. Según especialistas, las garantías alcanzadas se han plasmado en la ley, pero en lo social es donde se encuentran las mayores resistencias.

Millones de personas en todo el mundo celebran el Día Internacional de la Mujer al exigir un mundo con equilibrio de género, en medio de la brecha salarial persistente, la violencia y la desigualdad generalizada. En este contexto, en nuestro país, el Observatorio Nacional para la Igualdad de Género en las Instituciones de Educación Superior, en el que participa el Centro de Investigaciones y Estudios de Género de la UNAM, reportó que persisten las desigualdades en el ámbito académico y que ninguna de las 40 universidades que ha medido su primer año de actividades ha alcanzado siquiera un nivel intermedio de consolidación de la igualdad de género.

En el ámbito político, el consejero presidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova, dijo que en México se ha dado un gran salto, pues prácticamente se alcanzó la paridad en ambas cámaras del Congreso y ello ha originado que el país sea uno de los tres Estados en el mundo con mayor porcentaje de legisladoras. Sigamos adelante con esta lucha que hasta ahora parece exitosa.