Las remesas amortiguan la crisis económica morenista

Alvaro Cepeda Neri

Conjeturas

I.- Los más de once millones de mexicanos que radican como trabajadores en la geopolítica estadounidense, siguen enviando a sus familias los recursos económicos que los salvan de la miseria que padecerían sin ellos. Y que el año pasado ascendió a más de 36 mil millones de dólares. Es una cifra que significa un máximo histórico, como lo informa el reportero Israel Rodríguez (La Jornada: 5/II/20). Y es que esos mexicanos que allá son ocupados en cientos de servicios, sacrificando sus satisfactores ahorran para poder tener al día los envíos mensuales que satisfagan las necesidades de quienes dependen de ellos. Y eso ha permitido que la crisis económica mexicana –que ya pasó de recesión a depresión– se reduzca en sus efectos para millones que en nuestro país no podrían subsistir, ya que persiste el desempleo; agudizado por el amplio marco de inseguridad criminal. Por otro lado, los reporteros: Leonor Flores y Cristian Reyes (El Universal y El Financiero: 5/II/20), contribuyeron a enriquecer la información sobre el tema.

II.- Conocer la realidad de la cuantía de las remesas enviadas que causan un real bienestar y no son simple propaganda, nos entera del porqué desde hace más de medio siglo nuestro país ha podido sortear situaciones económicas de empobrecimiento; y que millones de mexicanos que no tienen la fortuna de recibirlas, continúan sufriendo un infierno social. Es decir, que las familias que reciben esos envíos en dólares pueden resistir la actual situación de recesión-depresión con menos problemas. Y es que los mexicanos –algunos de los cuales regresan cada año para visitar a sus familias– que allende la frontera norte laboran duramente en toda clase de tareas para obtener sus ingresos, guardan más de la mitad para remitirlos a millones de hogares, a fin de que sirvan para la supervivencia de esas familias que tuvieron que abandonar para irse lejos a conseguir lo que aquí no pudieron. Así es como los mexicanos de aquí han podido resistir –en este sexenio y los anteriores– los embates del desempleo y el alza de los precios, con todo y que se dice que la inflación ha cedido.

II.- Esas remesas se destinan, principalmente, a Michoacán, Oaxaca, Zacatecas, Guerrero y Nayarit; pero semejante derrama alcanza a otras 15 entidades. Las políticas económicas de los últimos cinco sexenios no han sabido cómo impedir que salgan del país trabajadores calificados y profesionales; agudizado este problema porque actualmente no hay gasto público y las inversiones privadas son limitadas, incluyendo las que vienen del extranjero. Así que esos 36 mil millones de dólares que llegaron en el 2019, fueron una extraordinaria ayuda económica. Solamente así es que nos explicamos que los mexicanos beneficiados por los recursos que reciben, no se sumen a los problemas sociales. Es importante resaltar que la economía estadounidense siempre ha necesitado de mexicanos para su prosperidad, dado que son muy serios y trabajadores; y convertidos a pesos los dólares con que les pagan, son enviados a nuestro país para sacar de la pobreza a millones. Esto ha estimulado la demanda interna mexicana, ya que es un consumo que ayuda a la producción.

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