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Opinión

COMO ANTICIPAMOS en esta columna, habrá cambios en los “palomeados” de Acción Nacional para los distritos locales. Los primeros serán dos del interior del Estado, por su nula capacidad de operación y constantes berrinches, la primera es Irais Barón, actual Subsecretaria y adscrita a la cabecera de Umán, y un segundo cambio muy probable en el Sur, con Raúl Carrillo, por el pobre avance que ha tenido. 

También se estará midiendo a los “palomeados” de Mérida, sobre todo la zona Poniente-Sur, que por la salida de Rommel Pacheco se tendrá que reajustar la estrategia, pues el exclavadista es un candidato que va a necesitar contrapesos que tengan capacidad de operación política si es que el PAN quiere ganar. Hoy, quienes están “trabajando” la zona traen nula estructura y las mediciones no los favorecen, como Felipe Pacheco, que prácticamente era una extensión de Rommel y hoy quedó operativamente “huérfano”.

Otro de los sacrificados en los palomeados de los distritos por Mérida será Gonzalo Puerto, no sólo porque no ha trabajado lo suficiente para hacerse del conocimiento del distrito 8, que es la zona de Caucel, sino porque es el suplente de Rommel Pacheco, quien estaría pidiendo licencia para competir por la Alcaldía de Mérida por Morena. Suena fuerte el nombre del regidor Raúl Escalante y también el de Gerardo Bolio para ser quienes suplan la ausencia de Gonzalo Puerto.

EL BARQUITO DE LOS REFUGIADOS: en medio de la incertidumbre por la definición de las candidaturas a la gubernatura por Yucatán, tanto por el partido guinda como por el Partido Acción Nacional, la candidatura de Cecilia Patrón Laviada a la Alcaldía de Mérida no deja de ser la pequeña embarcación que podría llenarse de inmigrantes de todas las corrientes panistas que se han visto envueltas en el tormentoso proceso interno del famoso “Equipo Yucatán”.

Tormentoso porque nadie pensaba que la cabra mayor que se les fue al monte no es Rommel Pacheco sino Jorge Carlos Ramírez Marín.

Van llegando todos aquellos panistas que alguna vez apoyaron la campaña interna de Liborio Vidal en el interior del Estado, pero que de un momento a otro ya no tendrán cabida en el nuevo proyecto político del vallisoletano que, un día sí y un día no, genera mensajes que causan aún mayor incertidumbre.

Van llegando todos aquellos panistas que ya no tuvieron entrada en el universo de las corcholatas que impulsa Roger Torres Peniche para capitalizar la mayoría en el Congreso. Van llegando todos aquellos funcionarios panistas que en la actual administración estatal no tuvieron el visto bueno del oficialismo para seguir una carrera política o que se quedaron a medio camino.

Van llegando todos aquellos que por la naturaleza de sus cargos tuvieron serias diferencias con el equipo Renancista, el cual, aseguran, no tendrá piedad con cualquiera que no sea de su círculo político.

La molestia en el equipo político de Cecilia Patrón es evidente: porque el espectáculo que se realizó en el foro GNP no resultó ser más que una mascarada en la que hoy nada de lo que se dijo en discursos se tradujo en realidad.

Por ello, trascendió que el equipo de precampaña de Patrón Laviada no se sentará a esperar a recoger los muertos de esta batalla interna y que, en los hechos, prepara una estrategia de amarres para fortalecer su estructura en Mérida, incluso con aquellos sectores que han sido desatendidos por el actual alcalde meridano, como las comisarías de Mérida y los grupos más vulnerables.

En esta estrategia, se espera una amplia batalla por el antiguo Sur profundo de Mérida, en donde las bases morenistas cuentan con mucha presencia orgánica, particularmente de Joaquín Díaz Mena y de Claudia Sheinbaum.

LA SOBERBIA DE RENÁN BARRERA ESTÁ RINDIENDO FRUTOS, pero no los que él desea, sino los que puede merecer. El haber afirmado durante tantos años y meses que el PAN puede solo, está causando los efectos que tales afirmaciones iban a tener. Vemos cada vez más lejos la posibilidad de una alianza entre el PRI, PAN y PRD en el Estado. Tanto es así que muchos priistas ya se están uniendo a Morena o a sus partidos satélite.

Pero lo más preocupante para Renán no está en el PRI ni en el PRD, sino en el PAN. Los actores que más votos aportarán a ese partido, y que son fundamentales para lograr el triunfo, están abandonando Acción Nacional, y todo debido a la arrogancia y a la falta de voluntad de negociación de Renán y su camarilla. Ya se fue Rommel, y se fue porque nunca le abrieron realmente la puerta. ¿Están esperando que un peso completo, como Liborio Vidal, también se vaya?

FUE ESCANDALOSO PARA LOS PANISTAS, pero generó una amplia expectativa en el lado de Morena ver a Rommel Pacheco con Claudia Sheinbaum. El exclavadista puso sus redes sociales al servicio de la 4T y pone en peligro algo que el PAN considera suyo: la Alcaldía de Mérida, e incluso hasta la gubernatura. Rommel, unido a su esposa Lylo, pueden atraer a un gran mercado de clase media y jóvenes hacia el proyecto de la 4T y hacerle una seria competencia a Cecilia Patrón en la Alcaldía de Mérida. La soberbia sigue dando frutos; complicado lo que se avecina para la próxima dirigencia partidista.

PARECIÓ DESANGELADA LA SALIDA DE RAMÍREZ MARÍN. Suponemos que en su equipo de estrategia esperaba más aspavientos, más ruido, pero no lo hubo. Esto revela que la fuerza política del “gordito” es cuasi nula, solamente duró unas horas y eso es porque no había nada mejor en el tintero de la conversación política. Él espera que le dé para poder negociar alguna posición plurinominal porque electoralmente se antoja difícil verlo en la boleta, lo que sí no podemos negar es que poco o mucho, el gordito sabe hacer ruido.

EL QUE PARECE QUE AMAGÓ MUY EN SERIO FUE LIBORIO VIDAL en sus redes sociales. Aunque nos comentan en sus oficinas que la publicación que causó revuelo, donde dice: “He aprendido a no tenerle miedo al cambio, la vida está llena de grandes oportunidades y como dicen por ahí: cuando una puerta se cierra, otras se abren. ¡Feliz tuch de semana!”, se refería más a un proyecto empresarial, lo cierto es que la clase política entendió que se refería a su actual circunstancia política en el PAN.

Sabemos que Liborio Vidal no está contento, que los resultados de la designación del posible candidato del PAN no satisficieron a nadie, pues nunca fueron claros, parecen opacos, y obedecieron más a los intereses de un pequeño grupo económico y de poder, que al interés y simpatías de las grandes masas populares. Liborio es un caso serio porque si se va, las posibilidades de que Acción Nacional gane la elección son muy bajas.

¿Quién es el responsable? No sabemos si es el Gobernador, Renán Barrera, Roger Torres, Jorge Puga o algún otro operador político, pero lo cierto es que en tiempos de crear acuerdos estamos viendo una grave incapacidad para negociar. Lo quieren todo, pero, ¿de qué sirve tener el 100% de nada?

HAY GRANDES ESPECULACIONES SOBRE ESTA VISITA de Claudia Sheinbaum en particular, donde se prevé anuncios que pueden causar un terremoto en la política yucateca. Entendamos que, para Morena, Yucatán no significa un gran tesoro electoral. Pero, teniendo en cuenta que en este Estado se encuentran las inversiones del Tren Maya, reservas de agua, un bastión de seguridad y las posibles inversiones del puerto de altura, Yucatán podría ser la cereza del pastel, y de pronto podría apetecerle a Morena tener todo el Sureste pintado de guinda. Ya veremos.

LOS PRINCIPALES OPERADORES de Renán en el interior del Estado son Samuel Furlong y Rosa Adriana Diaz Lizama… sí, mi estimado lector, a nosotros también nos ganó la risa.

Esta columna está para recordarles a muchos que en Yucatán, Todo es Personal.

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