Burla y desafío a la Profepa

De la Redacción

TULUM, 31 de octubre.- A un mes que concluya su mandato el presidente Enrique Peña Nieto, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) sigue con las clausuras, que con el cambio de gobierno no se sabe la  situación jurídica de los casos que desde el 2008, se vienen dando y sin que se tenga conocimiento de temas resueltos, a pesar que en algunos ha intervenido la Procuraduría General de la República (PGR).

Tal y como se ha mencionado, de nada sirve que la Profepa proceda llevando a cabo diligencias y con ello clausuras, ya que los ecocidas poco caso hacen a estos sellos cuyas multas son muy caras, a sabiendas que con la clausura se da por concluida su participación como queda demostrado.

Ya que a partir del 2008, en el noveno municipio, se han dado múltiples clausuras, específicamente en la franja del Parque Nacional Tulum (PNT); y a ella se sumaron muchas más a lo largo del litoral, entre éstos en la zona de la franja de Tankah, la zona de Akumal, en la zona conocida como Punta Piedra, incluso, dentro de la Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an.

En la mayoría de los casos, los desarrolladores inmobiliarios carecían de las autorizaciones correspondientes en materia de Impacto Ambiental que es otorgada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), para llevar a cabo, las actividades de relleno en ecosistema costero de humedal y duna costera con presencia de vegetación de matorral costero y manglar, en algunos de estos casos fueron turnados ante la PGR, pero con todo y sello siguieron las edificaciones, entrando en funcionamiento estos sitios.

Será a partir del 1 de diciembre, cuando se de el cambio de gobierno y la situación de estos ecocidas, quedaran sin resolverse a pesar de que algunos de estos ya llevan los más de 10 años del proceso sin resultado, ya que las clausuras permanecen en estos mismos sitios.

Pese a ello, las clausuras  se siguen dando, sin que realmente eso impida que los ecocidas  dejen de estar laborando.