Síguenos

Última hora

Mazatlán vs. América en vivo: Sigue en directo el duelo de la J15 desde El Encanto

Quintana Roo

Poca producción en el campo morelense

Por Lusio Kauil

JOSE MARIA MORELOS, 3 de noviembre.- En el campo todo lo que se siembra solamente se recoge el 30 por ciento de la producción, por mucho que haya lluvia para ello, pues el tiempo ya es muy diferente al que se tenía hace unos 30 años, consideró ayer el señor Pascual Uc Witzil, veterano ejidatario del Kilómetro Cincuenta.

Indicó que con la poca producción agrícola que se está obteniendo ahora, el campesino tiene que sortearla para sobrevivir con ella.

Manifestó, en declaraciones a la prensa, que esta vez hubo lluvia regular para los cultivos, pero la cosecha del maíz, frijol y otros productos del campo no pegaron como otros años.

Refirió que, recientemente visitó algunos amigos que viven en los ejidos de Piedras Negras y Adolfo de la Huerta y vio que en esa zona, la producción de frijol y maíz, igualmente, es muy baja, como en el ejido Kilómetro Cincuenta.

Con esa poca producción, expresó, uno como campesino tiene ver cómo hacerle para que pueda sobrevivir, pues hizo ver que no hay de otra, la gente del campo la ha pasado siempre en la pobreza.

Por lo que respecta a la actividad frutícola, particularmente lo que son cítricos como naranja y mandarina, el productor expresó que también dio muy poco.

El productor Uc Witzil manifestó que pese a esa situación difícil que se vive en el campo por la poca producción que se logra obtener, él por lo menos está contento.

Dijo que, al menos, él tiene algo de cosecha para vender, sobre todo en estas fechas, y eso le ayuda mucho porque no compra lo que necesita.

Dio a conocer que ahora él está comercializando la poca cosecha de naranja, yuca y mandarina, y con eso sobrelleva la vida en esta cabecera municipal.

Don Pascual Uc Witzil es uno de los fundadores del ejido Kilómetro Cincuenta. Él llegó aquí cuando apenas era un jovencito, ahora ya cumplió sus 80 años y todavía se mantiene activo en las labores del campo y en el comercio local.

Siguiente noticia

Inconscientes, habitantes de Chunhuhub