Por Olivia Vázquez
Serán de mil a dos mil turistas por semana, los que comenzarán a redireccionarse a Tulum y Cobá por las agencias de viajes de Cancún al no llegar a un acuerdo de negociación con autoridades yucatecas que aprobaron un incremento de más del 100% para el ingreso de la zona arqueológica de Chichén Itzá. Sergio González, presidente de la AMAV en Cancún informó que por ahora se mantiene la inercia que se traía en las ventas que se tenían con antelación, por lo que el descenso del flujo turístico hacia Chichén Itzá y el incremento hacia los sitios arqueológicos de Quintana Roo será gradual.
El líder empresarial indicó que hasta ayer no se tenía ningún tipo de negociación o convocatoria por parte del gobierno yucateco para llegar a un acuerdo, por lo que la promoción del sitio arqueológico a partir de esta semana quedó suspendida y no será sino que lo demande directamente el cliente, que se le preste el servicio bajo la advertencia del incremento desmedido que se ha dado en los costos y de las condiciones que se enfrentan como la mala calidad del servicio y la problemática de los vendedores ambulantes.
De frente a este conflicto que se ha generado, el turistero refirió que esto no es un tema de tarifas, es la forma en que lo están haciendo y no están dando nada a cambio, “si se sentaran a negociar y nos dijeran que van a hacer un incremento gradual y va ir a acompañado de este programa de inversión, calendarizado y nosotros pudiéramos irlo atestiguarlo, se estaría en la mejor disposición todas las agencias y operadores de entrarle al incremento”, dijo al referir que cualquier incremento siempre va aparejado de mejoras y los temas relacionados con Chichén Itzá, en cuestión del ambulantaje y mejoras en el servicio se llevan pidiendo por décadas sin que pase nada.
En ello reiteró que el tema de los ambulantes dentro del centro arqueológico es realmente crítico y no sólo se trata de la venta de artesanías, sino de cosas muy malas, además refirió que estos ambulantes pagan 60 pesos a los custodios del INAH por entrar y la carencia de servicios de calidad de la Cultur, donde no se tienen bebederos, accesos a personas con discapacidad y demás, y el pueblo de Pisté, que bien podría ser un pueblo mágico carece de todo tipo de atención, y todo ello son temas que se vienen abordando por muchos años y que si bien heredó esta administración estatal, se tienen que resolver, pero no se puede dar un incremento sin nada a cambio.
En cuanto a la promoción del destino, informó que hasta ahora la respuesta del gobierno yucateco no los deja satisfechos y que la propuesta de postergar por sólo 15 días el incremento para que se puedan hacer pre-compras para los siguientes cuatro meses no es procedente.
El sector, informó, solicitó una prórroga de seis meses, por lo menos hasta el 30 de junio y después enfrentar un incremento gradual incluso del 33% para que se llegue a la captación buscada, pero esto debe ir acompañado de un calendario de obras y mejoras que se estarán realizando y todo ello no tiene una respuesta positiva.
Ante la falta de acuerdo, el líder empresarial informó que ya se inició el redireccionamiento del turismo hacia las zonas arqueológicas de Tulum y Cobá en Quintana Roo y aunque reconoció que será un proceso gradual que se estará dando, finalmente se verá un descenso en Chichén Itzá y un ascenso en el flujo turístico.
De la demanda del propio cliente, reconoció que sin duda Chichén Itzá es una de las zonas más demandas al ser una maravilla del mundo, sin embargo, no se le ofrecerá al cliente sino hasta que se solicite y se les advertirá de la problemática y de la calidad de servicios que va a encontrar a pesar del costo.