De la Redacción
Grave y sin poder declarar sobre lo sucedido, permanece el policía municipal José Francisco L. C., quien resultó herido la tarde del domingo en la Región 255, a manos de sicarios que los emboscaron a el y a su compañero Albin Iván López Valenzuela; quien murió al llegar al hospital.
Hoy se sabe, que los sicarios utilizaron un arma calibre 380 milímetros para atacar a los policías, aunque en el lugar donde se encontró la camioneta supuestamente usada por los sicarios, se encontraron casquillos de otros calibres.
En dicha unidad, se encontraron además, documentos que señalan como propietario de la camioneta, a un hombre de nombre Romeo J. F.
Nada se sabe de los sicarios que emboscaron a dos policías municipales, integrantes del EMAP, cuando circulaban por el fraccionamiento Paseos Nikte la tarde del domingo.
Uno de los policías, identificado como Albin Iván López Valenzuela, falleció al llegar al Hospital General, a donde fue trasladado en una patrulla de la misma corporación, junto con su compañero José Francisco L. C.; quien resultó gravemente herido.
Mientras en la corporación policial permanece un sentimiento de miedo y enojo tras lo sucedido, muchas interrogantes existen en torno a como se dio el ataque armado.
Esto, después de conocerse que en el lugar donde fue el ataque directo a los policías, se encontraron sólo cuatro casquillos percutidos calibre .380 milímetros y una ojiva metálica; además de las motocicletas marca Suzuki, con números 810 y 805, en las que viajaban los policías.
En la avenida Diamante, retirado del lugar del ataque, fue donde se encontró una camioneta Marca Ford Escape de color negro, con placas de circulación URM598-C del Estado de Quintana Roo, con número de serie 1FMYU031X2KD80012.
La unidad estaba en el camellón central, después de haber chocado contra un poste de alumbrado público y junto a ella se encontró tirado un fusil de asalto HK G36, calibre 5.54, con número de serie 83-006341; con un cartucho calibre .223 milímetros en la recámara; con un cargador abastecido con 26 cartuchos útiles calibre .223 milímetros.
Al interior de la camioneta, los peritos aseguraron cuatro casquillos percutidos calibre 9 milímetros, un casquillo percutido calibre .380 milímetros; un cartucho útil calibre .223 milímetros, cuatro cartuchos útiles calibre 7.62 milímetros para “cuerno de chivo”, y un casquillo calibre 7.62 milímetros para “cuerno de chivo”.
En una funda para guitarra que estaba dentro de la camioneta, se encontró una lámpara de mano, un cargador abastecido con 27 cartuchos útiles calibre .223 milímetros.
Se encontraron además, diversos documentos donde aparece como propietario endosado de la camioneta, Romeo J. F., y un teléfono celular.