Quintana Roo

La demanda de paseos en lancha fue buena

Por Yolanda Gutiérrez

 

ISLA MUJERES, 2 de noviembre.-Persistían favorables condiciones climatológicas la mañana del sábado para todo tipo de actividades acuáticas que, aunado al puente con motivo del Día de Muertos, propició una buena demanda de paseos en lancha entre los prestadores de servicios náuticos.

Según los pronósticos, la onda tropical número 47 y el frente frío número 8, que presenta características de estacionario, serán reforzados con una nueva masa de aire frío que provocará un ligero descenso en las temperaturas, viento fresco y arrachado del norte y noroeste, así como nubosidad y lluvias con chubascos con posibilidad de actividad eléctrica dispersa, sobre la Península de Yucatán y algunas zonas del estado de Quintana Roo.

Fuentes de Turismo municipal expresaron que la ocupación hotelera en el destino se ubica en alrededor de los 48 puntos porcentuales, lo que hasta cierto punto se compensa por la buena afluencia de turismo de pasadía, que visita la ínsula por unas horas para regresar posteriormente a Cancún, bien en los barcos de ruta, ferry o embarcaciones que zarpan de la zona hotelera y ofrecen el paseo con todo incluido.

“Los vecinos de Canadá y del norte de Estados Unidos se están preparando para tomar sus vacaciones lejos del frío del invierno, que se ha adelantado por los nortes anticipados; este segmento de turismo viene huyendo de las bajas temperaturas y es el que nos está ayudando ahora a mantenernos por encima del 40 por ciento”, expresaron las fuentes.

Añadieron que para la temporada navideña se estima una ocupación global cercana al 90 por ciento y expresaron que, sobre todo en la zona continental, los libros de reservaciones de los hoteles empiezan a “engordar”.

Dijeron que por lo general el turismo estadounidense y canadiense hace sus reservaciones con muchos meses de anticipación, lo que les permite aprovechar las tarifas promocionales que ofrecen la mayor parte de los centros de hospedaje que manejan el sistema de reservaciones anticipadas.

Aún no se aprecia un importante número de visitantes de pernocta, que arriban al destino con maletas y mochilas, hasta el punto que en cada barco de ruta eran menos de diez los turistas que descendían con equipaje.

La mayor parte del flujo, independientemente de trabajadores y residentes, eran turistas de pasadía, que ocasionalmente dejan derrama económica en arrendadoras de carros de golf, cooperativas náuticas, restaurantes y comercios en general, aunque la mayoría se encamina directamente a la playa sin interesarse por nada más, lo que no es de extrañar si se considera los exagerados precios que maneja la naviera Ultramar.