De la Redacción
Por negarse a pagar “derecho de piso”, un zapatero fue ejecutado la tarde de este sábado en el fraccionamiento Prado Norte de la Región 260.
Desde una motocicleta, dos sicarios llegaron hasta el puesto donde se encontraba el zapatero, disparándole en varias ocasiones para después darse a la fuga.
Gravemente herido, la víctima cayó al suelo, perdiendo la vida en el lugar, convirtiéndose en el ejecutado 344 de este año.
Minutos después de las 14:00 horas de este sábado, y en medio de la jornada violenta que se vivió durante este sábado, el número de emergencias 911 emitió el reporte de una persona lesionada con arma de fuego, en la Región 260, manzana 13, lote 3, sobre la calle Guayaba en el fraccionamiento Prado Norte.
Paramédicos de la Cruz Roja llegaron al lugar en la ambulancia QR-25, y al acercarse al lesionado que yacía sobre la calle, determinaron que ya no contaba con signos vitales.
Policías municipales acordonaron la zona y momentos después arribaron agentes ministeriales y peritos criminalistas, quienes iniciaron con el procesamiento de la escena del crimen.
Los peritos vieron que el ahora occiso vestía con short de mezclilla de color azul y playera de color blanco y cuando revisaron el cuerpo, vieron que a simple vista presentaba impactos de bala en el pecho del lado izquierdo y en la pierna derecha.
Agentes ministeriales se entrevistaron en el lugar con un hombre, que dijo ser hermano del occiso, a quien identificó como Angel Adrián E. C., de 33 años de edad, de oficio zapatero.
El entrevistado dijo a los policías que su hermano se encontraba en su puesto se reparación de zapatos, cuando una motocicleta tipo Cargo de color blanco, llegó al lugar con dos sujetos a bordo; acercándose hasta su hermano y le dispararon en al menos cinco ocasiones, para después darse a la fuga.
Agregó que tres días antes, sujetos desconocidos llegaron hasta el puesto de reparación de calzado, para cobrarle “derecho de piso” a su hermano” y cree que fue ejecutado por no haber pagado la extorsión.
En el lugar de los hechos, los peritos localizaron y aseguraron, cinco casquillos percutidos calibre 9 milímetros, trasladando después el cuerpo al Servicio Médico Forense (Semefo), convirtiéndose en el ejecutado número 344 en lo que va de este año en Cancún.