Por Yolanda Gutiérrez
El inicio del periodo vacacional no representa, al menos por ahora, una importante cantidad de bañistas en las playas, que se estima queden abarrotadas a partir de mañana Viernes Santo, cuando el turismo se vuelque a los balnearios públicos.
No obstante, el miércoles se registró una gran afluencia de bañistas en los principales balnearios públicos del destino, especialmente en Tortugas y Gaviota Azul; en esta última, visitantes nacionales y extranjeros se mezclaban con familias y grupos de amigos radicados en Cancún.
En Delfines, el aforo era bastante menor en los arenales y no todas las palapas rústicas estaban ocupadas, pero como contrapunto, destacó la larga fila de visitantes que esperaban con paciencia su turno para tomarse la consabida foto del recuerdo en el Parador Turístico, con las letras CANCÚN de fondo.
Los principales protagonistas fueron los niños que, aprovechando sus vacaciones, se divierten y apuran al máximo estas dos semanas antes de volver, una vez finalizado el periodo de asueto, a la rutina de clases y tareas.
Familias, turistas y grupos de amigos empezaron a llegar a balnearios como Las Perlas, Tortugas y Gaviota Azul desde temprano, con ánimos de pasar una agradable mañana, algunos llevando consigo todo lo necesario para disfrutar de la playa, desde sus propias sombrillas hasta neveras y bolsas de alimentos, pasando por casas de campaña.
En tanto que otros recalaron más tarde, con la intención de degustar sus sagrados alimentos en alguno de los balnearios públicos que ofrecen a los usuarios renta de mesas, camastros y sombrillas para su comodidad.
Meseros que laboran en los restaurantes de Tortugas señalaron que desde el pasado fin de semana notaron un ligero incremento en la demanda, que confían suba mucho más en estos próximos días, al menos hasta que concluya la Semana Mayor.
“Ahora tenemos una buena demanda, pero muchos de los que ocupan mesas y sombrillas son familias locales que traen consigo sus alimentos e incluso bebidas, limitándose a rentar el mobiliario playero, esperamos que a partir del viernes haya más turismo y nos suba el consumo”.
Aunque a primeras horas, la presencia de bañistas no era por demás representativa, pasado el mediodía el ambiente empezó a cambiar, pero aún así no se registraron grandes llenos en los arenales, pese a lo cual playas tranquilas como Las Perlas, Langosta, Pez Volador y Tortugas, con sus aguas poco profundas, son en las que se encontró una mayor afluencia de infantes, puesto que los padres consideran que son mucho más seguras para sus hijos.
Castillos y otras figuras elaboradas con la húmeda arena se encontraban a la orilla de la costa en los balnearios públicos más populares; los más pequeños chapoteaban con apoyo de salvavidas de todos tamaños, formas y colores, en tanto que otros más trajeron sus juguetes y muñecas favoritos, con los que disfrutaban plenamente, inventando improvisados juegos.