Por Romana Mora
TULUM.- 16 de mayo.- Tras varios años de sufrir el problema de los famosos jaladores turísticos, a la entrada a la zona arqueológica, las autoridades aun sin darle solución, afectando al visitante tras falsa información que en ocasiones reciben y dando una pésima imagen.
El problema de los famosos jaladores ya es cosa común, es un problema de todos los días, se dan ya sea en temporada baja como en temporada alta, y a pesar de ser un añejo problema, ninguna autoridad se ha tomado la molestia de ver la problemática.
Que viene afectar a todos por igual, la imagen turística que de antemano está ya afectada por la inseguridad y el sargazo que recala en nuestras costas, la temporada baja y ahora en Tulum, ya es cosa común que a medio camino de acceso a la zona arqueológica los turistas sean interrumpidos en su trayecto, dio a conocer Alex Torres Perera, guía de turista local.
Agregando que estas personas los introducen a estacionamientos que aparentemente son irregulares, donde les informan que para ingresar al sitio de monumentos, tienen que adquirir un paquete, ahí es una gran problemática, estacionamientos suficientes los hay, no obstante son mal informados.
Al detenerlos a medio camino igual los exponen a un accidente, este problema no es reciente ya lleva cerca de 8 años en donde cada vez están más permanentes y, la afectación es en general al destino turístico.
En muchos casos, los dirigentes han demandado que a la entrada de la ciudad amurallada aparte de ser dignificada, que se prevaleciera el orden al ser ese sitio la imagen del destino, ya que los turistas lo primero que visitan a su llegada al conocido destino vacacional ha sido la famosa zona arqueológica de Tulum, por su ubicación colindante con el mar Caribe.
Y aunque se llevó a cabo una primera etapa para la significación, fue una obra mal elaborada, que quedará a medias de acuerdo con los mismos prestadores de servicios del sitio en la segunda etapa, concluyó.
El problema de los jaladores turísticos no es novedad y en cada campaña le les prometen resolver la problemática, pero el problema es que ya lleva 8 años y persiste en donde en muchos casos exponen mentiras, como el cierre de la zona arqueológica, o las playas y cuando el turista arriba a estas y observa el sargazo queda decepcionado, presumiendo que les vendieron algo que no existe.