Quintana Roo

De la Redacción

Intentan ejecutar a taxista y a sus acompañantes la madrugada de ayer, sobre la importante arteria vial que conecta a Cancún con Puerto Morelos, testigos de la persecución, aseguraron que un hombre a bordo de una camioneta Chevrolet de color azul iba disparando hacia la unidad de alquiler con número económico 7100, la cual llegando a la altura del kilómetro 331 la golpeó por alcance, provocando que se saliera del camino, debido a la velocidad con la cual ambas unidades eran conducidas, el sicario también perdió el control y salió de la vía de circulación, quedando 20 metros más adelante donde se dio el impacto, pero el hombre no quitó el dedo del renglón, a pie fue a buscar a los pasajeros del taxi a quienes les volvió a disparar, logrando herir a uno; en el lugar quedaron dos cartuchos útiles calibre 9 milímetros.

Todo estuvo a favor de un solitario sicario, quien la madrugada de ayer, alrededor de las 02:30, intentó ejecutar a un taxista y a sus tres acompañantes, ya que el taxs perteneciente al sindicato Andrés Quintana Roo, Nissan tipo Tsuru, con número económico 7100 y matrícula 68-76-TRV, proveniente de Solidaridad, fue atacado a balazos pasando Puerto Morelos, extrañamente de las tres a cuatro patrullas de la Policía Federal que cada fin de semana se dividen los 10 kilómetros de entre el Hotel Moon Place y Bahía Petempich, no había ninguna, el hombre sólo esperó el momento y llegando a la altura del kilómetro 330+500 comenzó a disparar.

Automovilistas que transitaban sobre la carretera con dirección a Cancún alcanzaron a ver y a reaccionar a tiempo, pues desde la camioneta que le había puesto “cola” al taxi, el conductor sacó un arma de fuego y comenzó a disparar, el taxista aceleró su marcha mientras que los otros conductores disminuyeron su velocidad e incluso algunos se detuvieron sobre la vía rápida y vieron como 500 metros más adelante a la altura del kilómetro 331, el conductor de la camioneta impactó por alcance la unidad de alquiler, la cual iba circulando en zigzag para evitar ser blanco de los disparos, pero del golpe en la parte trasera fue sacada del camino hacia su extrema derecha, de la misma velocidad el sicario alcanzó a avanzar alrededor de 20 metros más entre la maleza y cuando por fin un árbol detuvo su marcha, bajó y caminó hacia donde estaba el taxi accidentado.

Los cuatro tripulantes del taxi, entre ellos el conductor, iban saliendo hacia la orilla del camino cuando el hombre comenzó a dispararles nuevamente por lo que se tiraron sobre la maleza, aún así uno de los pasajeros resultó herido, y a pesar de que el sicario todo tenía a su favor teniendo como escenario una de las vías más importantes, el arma de fuego se le encasquilló, por lo cual cortó cartucho y dejó caer dos proyectiles útiles, finalmente se dio por vencido y simplemente desapareció del lugar.

Los testigos piensan que otro vehículo lo iba “escoltando” y en ese mismo se dio a la fuga, ya que nadie logró ver qué rumbo tomaba por la oscuridad del tramo y porque muchos optaron por resguardarse dentro de sus vehículos para no ser blanco de una bala perdida, habían pasado escasos minutos y ni los tripulantes del taxi, así como los conductores daban crédito a lo que habían presenciado o sido víctimas, el silencio que dejó el ataque se rompió, cuando uno de los pasajeros herido por un impacto de arma de fuego comenzó a pedir ayuda.

Alrededor de 15 personas fueron las que se detuvieron para apoyar a los tripulantes del taxi, y mientras unos “vigilaban” que el sicario no regresara a rematarlos, otros solicitaban una unidad médica al número de emergencias 911 y el resto abanderaban la zona para evitar un accidente.

Ambulancias privadas que se encontraban cerca fueron las que atendieron el auxilio, y luego de brindarles los primeros auxilios a los tripulantes del taxi, sólo trasladaron a los pasajeros, uno de ellos herido por un disparo, los otros dos por los golpes sufridos tras ser impactados, en tanto el conductor se quedó en el lugar.

Alrededor de 45 minutos después llegaron elementos de la Policía Federal, para ese entonces los mismos testigos ya habían localizado los cartuchos útiles y los habían señalizado, minutos después policías municipales de Puerto Morelos llegaron sólo para tomar conocimiento y se retiraron.

Ya amaneciendo, la camioneta y el taxi fueron remolcados a un corralón a bordo de una grúa, a esa hora la circulación ya era más fluida y se vio entorpecida por algunos minutos mientras la grúa maniobraba sobre el carril de baja, los cartuchos fueron asegurados por los mismos policías federales, quienes iban a proceder conforme a la ley.