Por Gerardo Reynoso
Con el objetivo de establecer una cooperación y coordinación internacional en el Caribe, así como analizar el riesgo de que el Golfo de México se convierta en un segundo mar del sargazo, arranca de manera oficial este jueves, la Cumbre Internacional para atender el problema del alga marina en el Caribe.
La sede del encuentro será el hotel Moon Palace y ahí expertos, científicos, delegados de 19 países y miembros del sector empresarial, debatirán en un encuentro de alto nivel para determinar el futuro a corto, mediano y largo plazo en torno a la presencia del sargazo en la región Caribe.
Dentro del encuentro, se busca fijar una agenda común en materia turística para la atención del sargazo, así como un trabajo multidisciplinario que involucre directamente a todos los países que se ven afectados.
Se trata de una cooperación regional encaminada a evitar daños colaterales en materia económica -relacionada principalmente con el turismo-, de la región que abarca el Caribe.
En el caso de Quintana Roo, Alfredo Arellano, titular de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA), será el encargado de exponer los motivos, por los cuales, se hizo necesario realizar la cumbre.
Para sustentar esto, la entidad tiene cifras que muestran la realidad del problema. En 2018, más de 17 mil habitantes participaron de manera voluntaria en la labor de recolección de sargazo y, bajo la coordinación de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente fueron retiradas 528 mil toneladas de sargazo de playas y zonas costeras en siete municipios.
Además, se colocaron 27 kilómetros de barreras antisargazo en varios municipios. En total se invirtieron 240 millones de pesos, de los cuales, el gobierno federal apoyó con 62 millones de pesos.
Este año, como parte de la estrategia del gobernador Carlos Joaquín denominada “Protocolo Emergente para la Atención del Sargazo”, la cual encabeza Alfredo Arellano, secretario de Ecología y Medio Ambiente, se acordó dividir el litoral costero de Quintana Roo en nueve zonas y dos islas: Mahahual-Xcalak, Tulum, Akumal-Puerto Aventuras, Puerto Aventuras-Hard Rock, Playacar, zona entre muelles Playa del Carmen, muelle Ultramar-Punta Maroma, Punta Nizuc-Punta Cancún, Puerto Morelos, Cozumel e Isla Mujeres.
Este Protocolo busca evitar la llegada del sargazo a la playa, mantenerlas limpias y darle un uso sustentable al sargazo al recolectarlo para ser aprovechado. Además, los empresarios de hoteles y concesionarios de zonas de playa reciben la información del protocolo estatal, a fin de articular de manera conjunta estrategias para la contención de sargazo, desde barreras de contención cercanas a la playa y todo lo que represente la recolección y disposición final de la macroalga.
Esta estrategia de contención del sargazo en la línea de costa y aguas someras forma parte del primer grupo de acciones de la estrategia emprendida por el Gobierno del Estado.
Una segunda línea de acciones involucra la contención en aguas abiertas en donde será muy necesaria la participación de las entidades federales que ha sido motivo de reuniones, en las cuales, se encuentra el Gobierno del Estado involucrado.
La posibilidad de un segundo mar del sargazo en el Golfo de México
Otro tema que será puesto en la mesa de discusiones dentro de la Cumbre, será la posibilidad de que se genere un segundo mar del sargazo en el Golfo de México, debido a la gran acumulación del alga que llega a esa zona desde el Caribe.
De acuerdo a estudios de la Universidad de La Florida, la posibilidad es más que latente, ya que, se encuentra en su momento más crítico de arribo de sargazo en el año, siendo que la llegada del alga continuará al Golfo de México y hasta la costa de La Florida, Estados Unidos.
En ese punto, la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA) sostuvo que entre los países más afectados se encuentran México, Estados Unidos, Nicaragua, República Dominicana, Barbados, Honduras, Guatemala y Panamá y que a la lista se deben agregar comunidades caribeñas en países como Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Dominica, Granada, Guyana, Haití y Jamaica, San Cristóbal, Santa Lucía, San Vicente, Surinam, Montserrat y Trinidad y Tobago.
Aunado a esto, el sargazo que asola a países del Golfo de México, la Cuenca del Caribe y Sudamérica amenaza a África y Europa y se prevé que se extienda por el Atlántico, desde el Mar de los Sargazos a islas Azores, Cabo Verde, Mar del Norte y el Peñón de Gibraltar, según un informe del Instituto de Ciencias Oceánicas de Canadá, suscrito por los investigadores Jim Gower y Stephanie King.
Los científicos canadienses que analizan las causas -atribuidas en principio a la falta de controles sobre emisiones químicas- por las que el Mar de los Sargazos es desbordado por una biomasa de macroalgas marinas y microorganismos de miles de especies, crece un millón de toneladas al año, que son dispersadas por corrientes marinas a todo el mundo.
“Las algas jóvenes llegan al Mar de los Sargazos antes de julio y se suman a la biomasa que después navega en el Atlántico. Al llegar al Golfo de México, encuentran la oportunidad perfecta para que sus desechos se coagulen, formando lo que los estudiosos llamamos ‘parches de basura’”, exponen en el documento.
“Estas zonas son apenas perceptibles y bajo la presión implacable de las olas, los residuos se fraccionan en partículas microscópicas, lo que las hace aún más letales para el medio ambiente”. “Una vez reducidas a tamaño pequeño, esas partículas artificiales son ingeridas por el plancton, que a su vez alimenta toda la cadena alimentaria, hasta los depredadores del ambiente marino”, indican especialistas.
Además, señalan que “las corrientes marinas que fluyen desde el Golfo de México y la Cuenca del Caribe sigue a islas Azores, islas Canarias, costas de España y Portugal, hacia Europa, a costas mediterráneas y Mar del Norte”.