Taller de periodismo ambiental sobre arrecifes

Por Eva Murillo

Los arrecifes de coral son fundamentales para la seguridad costera y son el termómetro natural que mide los errores humanos. Quintana Roo tiene un guardián de su litoral de 400 kilómetros en este ecosistema marino, que a pesar de ser lastimado diariamente por aguas residuales mal tratadas, malas prácticas de turistas y prestadores de servicios y el reciente brote de una enfermedad que está matando a los corales, sigue vivo.

Mientras cumple con su función protectora, espera que existan las condiciones idóneas para reponerse de las enfermedades que padece, con ayuda de decenas de manos y mentes científicas que dedican horas a encontrar soluciones para ellos.

En 2018, con el brote del “síndrome blanco”, empezó la mala racha para el sistema arrecifal de Quintana Roo, que puso en alerta a decenas de científicos de la entidad, de otros estados de México, e incluso del extranjero.

Los esfuerzos de investigadores por descubrir la manera de detener la epizootia (epidemia), conocer qué la origina, saber cómo curarla y evitar que afecte a más corales, son diarios.

Mientras ellos intercambian ideas para ponerlas en práctica lo antes posible y lograr mantener vivo el arrecife, en la costa siguen rellenándose las playas, talando mangle, construyendo hoteles, echando aguas residuales en cenotes y usando los ríos subterráneos como fosa séptica, entre otras malas prácticas ambientales.

Resulta que los corales resienten las actividades contra el medio ambiente que ocurren tierra adentro, aunque están escondidos dentro del mar -pero a una distancia suficiente para poder proteger a la costa en caso de un huracán- con su estado de salud pueden avisar que algo no está marchando como debe ser.

Si la presencia de corales disminuye, también baja la población de peces y eso afectará a miles de personas dedicadas a la pesca; si los corales dejan de tener peces, ya no serán atractivos para los millones de turistas que cada año visitan alguna zona de Quintana Roo para observarlos y eso generará que miles de prestadores de servicios vean en peligro su fuente de empleo; si los corales mueren, Quintana Roo ya no estará lo suficientemente protegido en sus costas cuando llegue un huracán.

Al mismo tiempo que investigadores se tiran al mar con las herramientas necesarias para analizar la salud de los corales y curarlos en caso de que estén enfermos, así como para documentar con fotografías los cambios que detectan en ellos, en la costa las máquinas siguen excavando y rellenando manglar, en las oficinas los desarrolladores e inversionistas están reunidos ideando qué hacer para aprovechar las lagunas en la ley y obtener los permisos para levantar hoteles o fraccionamientos.

Los arrecifes de coral son la atracción turística más importante en Cozumel, Puerto Morelos, Punta Nizuc y Punta Cancún. Según cifras oficiales, atraen a más de un millón de visitantes por año, que dejan una derrama económica de aproximadamente de 60 millones de dólares anuales a operadores turísticos locales.

Pedro Medina Rosas, doctor en Biología Marina, y Melina Soto, coordinadora para México de Healthy Reefs for Healthy People, son parte del grupo de investigadores que compartieron parte de su experiencia en el Taller de Periodismo y Manejo Costero para la Conservación de los Servicios Ambientales del Arrecife Mesoamericano.

Periodistas de Guatemala, Honduras, Belice y Estados Unidos se reunieron en Cozumel para conocer las amenazas que enfrentan los corales y las acciones que están en marcha para protegerlos.

La Red de Periodismo por la Tierra (EJN, por sus siglas en inglés), la Red Mexicana de Periodistas Ambientales (REMPA) y Healthy Reefs for Healthy People, fueron los organizadores de la reunión de trabajo entre investigadores y representantes de medios de comunicación.

En el taller para periodistas ambientales, conocieron las estrategias de cuidados que ciudadanos y autoridades implementan en el Parque Nacional Arrecifes de Cozumel pero también las amenazas que se ciernen sobre el ecosistema marino, tales como el sargazo, el síndrome blanco y la basura.

Citas

“Los corales significan un misterio y maravilla de la naturaleza, porque no hemos terminado de entender a estos animales tan importantes para el planeta y para los humanos.”

“Son organismos que representan un gran reto para estudiarlos y principalmente, protegerlos y conservarlos.”

Pedro Medina Rosas

Doctor en Biología Marina

“Son la expresión de la ‘magia’ de la naturaleza, que organismos tan diminutos puedan crear estructuras tan grandes y ser la base de la vida de cientos de otras especies, me parece increíble”.

“Son una inspiración: muestras de resiliencia, fragilidad, redes de colaboración, creatividad y belleza. Perderlos sería muy grave ecológicamente, pero también perderíamos un patrimonio sociocultural muy importante para toda la humanidad”.

Melina Soto

Coordinadora para México en Healthy Reefs for Healthy People