Por Yolanda Gutiérrez
Ante la voracidad de los intermediarios, que pagan una miseria por sus cosechas para revenderlas a mucho mayor precio a los comerciantes, pequeños productores de Quintana Roo y Yucatán comercializan directamente los productos del campo en los tianguis de Cancún, lo que permite que puedan ofrecerlos a precios más competitivos, beneficiar a las amas de casa y mejorar sus ventas.
El cliente sin duda alguna se beneficia por partida doble ya que, además de precios más asequibles, las frutas y verduras que se venden en los tianguis son de mucha mayor calidad que las que se exhiben en los grandes supermercados y, sobre todo, con sabores mucho más intensos, que se aprecian hasta en el humilde jitomate.
Los informales que comercializan productos del campo pueden, con esta estrategia de venta directa, permitirse el lujo de fijar precios más asequibles a los del mercado establecido y favorecer a las familias de menores recursos económicos, que ven los tianguis como una buena opción para hacer rendir más su presupuesto, especialmente a fines de quincena o cuando tienen que apretarse el cinturón aún más a causa de algún imprevisto.
Comerciantes informales de frutas y verduras que todos los domingos se instalan en el tianguis de la Región 100 coincidieron en señalar que les favorece mucho más desplazarse hasta Cancún desde sus poblaciones de origen, con el gasto en combustible que esto representa, antes que vender sus cosechas a los intermediarios, que les “machetean” sin misericordia y ofrecen una miseria por los productos, para luego revenderlos a precios infinitamente mayores en los negocios establecidos del ramo.
Tras recorrer el mercado sobre ruedas, que crece sin cesar ocupando cada vez más espacios, se pudo constatar que la mayor afluencia se encontraba en los puestos que ofrecen frutas y verduras, donde pueden encontrarse bolsas y bandejas con casi un kilogramo de papa, chile morrón, tomate, zanahoria, o aguacate local a precios que oscilan entre los 15 y los 20 pesos, en tanto que, en promedio, ofrecen el kilo de limón a ocho pesos.
Sandía, papaya, melón y frutas similares se venden en porciones de diferente tamaño por lo que su precio varía conforme al peso, aunque en líneas generales medio melón fluctúa entre los 20 y 35 pesos, en tanto que la papaya se encuentra entre 15 y 25 pesos, también de acuerdo al peso del producto.