Por José Ramos
BACALAR, 14 de septiembre.- Se acentúa la temporada baja en el Pueblo Mágico de Bacalar, destino que se mantuvo semivacío durante el fin de semana largo, con motivos de los festejos patrios.
A pesar de que algunos prestadores de servicios aseguran que en Bacalar no hay temporadas bajas, durante el presente puente vacacional se registró una evidente ausencia de visitantes en el Pueblo Mágico.
Balnearios y corredores a lo largo la Costera se mantuvieron con una mínima afluencia de turistas, a pesar de que Bacalar se mantiene como uno de los destinos preferidos en la entidad.
La expectativa en cuanto a ocupación hotelera para el fin de semana largo eran de un 50 por ciento de ocupación; no obstante, las cifras se mantuvieron por debajo del 40 por ciento.
Hoteleros y prestadores de servicios señalaron que el nivel de ocupación no era lo esperado y se le atribuye a la temporada baja, periodo en el cual la afluencia de personas disminuye sustancialmente en varios destinos de la entidad.
Cabe recordar que durante el verano pasado, el Pueblo Mágico de Bacalar cerró la temporada vacacional con balance positivo y como uno de los destinos preferidos del turismo nacional e internacional.
Bacalar se refrendó durante el verano como el destino del sur de Quintana Roo más importante, al reportar llenos totales en fines de semana y ocupaciones promedio del 85 por ciento durante toda la temporada vacacional.
La Laguna de Bacalar es uno de los escenarios más espectaculares de Quintana Roo y del país. Sus diferentes grados de profundidad y los tres cenotes que aloja en su interior generan toda una gama de tonalidades azules.
Sus aguas de múltiples tonalidades dan pie a prácticas como el kayak, paddle board y para los turistas más aventureros los recorridos por los rápidos y el Canal de los Piratas son las actividades que no fueron la excepción durante las pasadas vacaciones.
A las orillas del cuerpo lagunar existen varios alojamientos pequeños e íntimos, perfectos para relajarse en cualquier estación del año, y durante el verano pasado miles de turistas eligieron pasar sus vacaciones en contacto directo con la naturaleza.
No obstante, durante el pasado fin de semana largo, los balnearios del Pueblo Mágico se mostraron semivacíos al igual que muchos restaurantes y hoteles que esperaban una mejor presencia de visitantes.
Actualmente la ocupación promedio del destino gira alrededor de un 35 por ciento, cifra muy por debajo de lo registrado durante el pasado periodo vacacional.