De la Redacción
No sólo la Secretaría de Seguridad Pública de Quintana Roo ha mostrado indiferencia, por la desaparición y asesinato de uno de sus elementos con grado de inspector. La Fiscalía General del Estado (FGE), también ha sido indolente ante el sufrimiento de los familiares del policía ministerial Jorge Aparicio Domínguez, quien lleva más de dos meses desaparecido.
El enojo se extiende hasta el personal de la misma dependencia, quienes exigen que lleven acciones verdaderas, para dar con su paradero.
Desde principios del mes de agosto, se dio a conocer la desaparición del policía ministerial Jorge Aparicio Domínguez, escolta de la fiscal anticorrupción, Rosaura Villanueva Arzápalo.
Primero, se dijo que había sido detenido por personal de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), junto con el abogado Alejandro Martínez Córdova.
Sin embargo, días después la misma Fiscalía General del Estado (FGE) publicó una ficha de desaparición de persona, al confirmar que ninguna autoridad federal había detenido al policía.
Sin embargo, la dependencia estatal no ha dado a conocer qué avances tienen en la investigación iniciada por la desaparición del policía, e incluso, personal de la misma dependencia exige saber qué fue lo que pasó con el agente ministerial.
Los familiares del agente ministerial desde un principio temen lo peor y viven con desesperación y zozobra, al no tener información confiable y verídica de las autoridades locales; y acusaron que la Fiscalía General del Estado los dejó solos, sin importarles realmente la suerte que haya corrido el agente ministerial.
El enojo dentro de la Policía Ministerial renació en estos días, cuando la Fiscalía General del Estado emitió un comunicado, en el que aseguraba que llegarían hasta el fondo para esclarecer el asesinato del Inspector de la Policía Estatal, José Antonio Archi Yama; recordando que por su misma gente, no han hecho nada, cuestionando para cuándo esclarecerán la desaparición del policía ministerial.