Por Karina Carrión
COZUMEL, 4 de septiembre.- Habitantes del asentamiento Las Fincas denuncian que empresas tratadoras de aguas negras acuden por las madrugadas a depositar estas en los predios baldíos de la zona, lo que podría generar una severa contaminación al manto freático. Temen que se llegue a los cenotes y pozos de agua de sus hogares.
Denuncian que supuestamente acuden a depositar las aguas negras en los caminos que enlazan a la ampliación Félix González Canto con la prolongación Bulevar Aeropuerto que da ingreso al asentamiento.
Al menos así lo consideró José Chan Gómez, quien aseguró sentir temor de que pueda registrarse una contaminación en los cenotes cercanos a esas zonas de vialidad con terracería, porque consideró que “si se filtran las aguas negras al manto freático, esta agua contaminada se extiende a los cenotes y a los pozos cercanos y muchas familias tenemos pozos en Las Fincas, ojalá que las autoridades ambientales puedan ubicar a los responsables de estos vertimientos”.
Los denunciantes coincidieron que la práctica del desagüe de las pipas con al parecer las aguas negras, podría estarse practicando a altas horas de la madrugada, debido a que ingresa mucha gente que labora en las noches en hoteles y algunos vecinos habían referido que en el horario entre las tres y seis de la mañana habían observado pipas estacionadas en el camino de terracería con las mangueras desaguándose hacia el monte, dijo Chan Gómez.
Asimismo, Nora María Pech, también vecina del mismo asentamiento, explicó que la falta de vigilancia policíaca deriva en que personas ajenas a la zona ingresen para depositar su basura, animales muertos y en recientes ocasiones, a descargar las aguas negras que temen pudiera generar una contaminación a los pozos de donde hacen uso del agua para su hogar, además de que genera olores fétidos imposibles de tolerar al caer algunos residuos del líquido de las pipas, lo que deja charcos de aguas negras en los caminos, complicándose así su trayecto con sus hijos y familias que tienen que respirar el aire contaminado, comentó.
Es de resaltar que en poco más de siete metros del camino de terracería se observaron charcos de agua de color obscuro y con olores fétidos e intensos que pese a las altas temperaturas, no se evaporaban o filtraban en su totalidad, lo que complicó el acceso para uno que otro habitante de Las Fincas.