De la Redacción
COZUMEL, 3 de enero.- El ferry de carga de la naviera Ultramar tiene fracturas en las amuras en la zona de popa, aún así, está operando en el traslado de vehículos hacia Punta Venado, según fotografías y videos difundidos por usuarios, lo que produce un factor de riesgo para los mismos. Atribuyen que esas fracturas se generaron por una especie de presión en el casco, provocando las fisuras hasta arriba.
Mediante fotografías y videos difundidos por personas que han utilizado este medio de transporte, se puede observar que el ferry de Ultramar denominado Ultracarga IV, tiene fracturas visibles en sus amuras, como se le conoce a la especie de “aletas”, costados, o barandales, que circundan los barcos y que se estrechan a babor (izquierda) y estribor (derecha) para formar la proa (parte delantera) y popa (parte trasera).
En las fotografías, se aprecia las fracturas en láminas metálicas, y para que el metal no se separe totalmente y ceda por completo dejando una abertura, se le colocó a cada una, un artefacto conocido coloquialmente como “trinca”, que es una cadena para mantener unidas ambas placas de cada lado y evitar que se abran por completo, en este barco que apenas el 1 de noviembre lo presentaron como nuevo y arrancaron sus operaciones en Cozumel como ferry de carga llevando vehículos hacia el macizo continental.
El ferry de carga presenta en el exterior de babor, la fractura junto a uno de los logotipos que maneja Ultramar en su barco y se nota la respectiva “trinca” para sujetarlo a una base fija.
Respecto al exterior en la zona de estribor, aparece una franja vertical en color amarillo, más tenue que la pintura original, e internamente se aprecia también la llamada “trinca” que los sujeta para evitar que se desprendan.
Fuentes extraoficiales manifestaron que en este costado se habría efectuado una especie de soldadura pero que no aguantó y se volvió a fracturar, porque este tipo de barcos no son para aguas con oleaje al que se tiene en Cozumel, sino que fueron diseñados para lagos sin oleaje ni viento, no para mar en estas condiciones.
Con relación a las fracturas, opinan que se debe a un problema de presión que estaría resintiendo el casco del barco por el oleaje, y que se traslada hacia la parte superior provocando las fracturas, que con los oleajes de los frentes fríos recientes provocaron fisuras que se van agrandando en esos costados.
No se podría argumentar que algún camión los colisionó porque se encuentran en una zona demasiado alta, donde ningún vehículo los alcanza.
Un dato aportado por personas que han viajado a bordo de este ferry de carga, es que al estar navegando, la empresa envía a una persona a cada amura dañada como para supervisar que no se rompa, pero por lógica no pueden hacer nada para impedirlo o para evitarlo en caso que suceda abruptamente.