Quintana Roo aumentó 291 por ciento en los casos de tuberculosis a comparación del año pasado, es decir en 2019 reportó 307 casos, hasta la semana 40, mientras que 2020 en el mismo periodo ya cuenta con 895 enfermos, además que a nivel peninsular la entidad encabeza la lista de este padecimiento, ya que Campeche cuenta con 134 y le sigue Yucatán con 112 infectados, de acuerdo con el Sistema de Vigilancia Nacional de Epidemiología.
Homero León, jefe de la Jurisdicción Sanitaria número 2, explicó que la ciudadanía no se preocupa en cuidar su salud, pues la mayoría de las enfermedades si se detectan a tiempo pueden ser curadas y en el caso de las enfermedades crónicas, con un buen tratamiento se puede evitar complicaciones a futuro.
"En el caso de la tuberculosis, la gente debe entender que una tos de más de 15 días no es normal, sin embargo, uno de los problemas por los cuales se complica la enfermedad es por la automedicación; como no hay un control, esto forma una resistencia contra los medicamentos y es cuando se complica, lo mejor es acudir al centro de salud, para que se les realice una muestra y así confirmar o descartar si existe una infección respiratoria complicada o no".
"La población en general no acude al médico, hasta que ya presenta síntomas importantes, es muy rara la vez que alguien asista sólo por un chequeo de rutina, sin embargo, la salud es una responsabilidad personal y es más fácil prevenir que curar", dijo el galeno. Por otro lado explicó que es más peligrosa la propagación de tuberculosis que la lepra, así que debemos poner más atención en esta enfermedad.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la tuberculosis es una enfermedad infecciosa que suele afectar a los pulmones y es causada por una bacteria (Mycobacterium tuberculosis). Se transmite de una persona a otra a través de gotículas generadas en el aparato respiratorio de pacientes con enfermedad pulmonar activa.
La infección por M. tuberculosis suele ser asintomática en personas sanas, dado que su sistema inmunitario actúa formando una barrera alrededor de la bacteria. Los síntomas de la tuberculosis pulmonar activa son tos, a veces con esputo que puede ser sanguinolento, dolor torácico, debilidad, pérdida de peso, fiebre y sudoración nocturna. La tuberculosis se puede tratar mediante la administración de antibióticos durante seis meses.
Por Angélica Gutiérrez