La falta de protocolos de seguridad en las empresas ha provocado que en el mes de noviembre se registre 12 accidentes en el área laboral, lo que cobró la vida de una persona en Quintana Roo y dejó lesiones de consideración al resto de los trabajadores, dio a conocer Catalina Portillo, titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en el estado, quien añadió que los obreros de la construcción pertenecen al sector con más incidentes.
Las sanciones para las empresas que presentan condiciones que son un riesgo para los empleados y no cumplan con las medidas necesarias para evitar accidentes, van desde los 250 a las 500 Unidades de Medida de Actualización (UMA), que significan de 21 mil 750 o 43 mil 435 pesos.
Incluso, el primero de diciembre un hombre que daba mantenimiento a una palapa de la zona hotelera en Cancún murió al caer de una altura de siete metros. Aunque se encuentra en fase de peritajes, las primeras declaraciones señalan que el trabajador no contaba con equipo de protección como un arnés, casco, guantes y botas.
La falta de seguridad en la construcción ha quedado nuevamente visible también en la Riviera Maya, donde dos trabajadores murieron en las obras de un hotel en Solidaridad con pocos días de diferencias, con fracturas múltiples producto de caídas de varios metros en áreas de trabajo, donde la falta de arneses de seguridad y otros protocolos les cobró la vida.
El primero, quien sufrió el accidente el 26 de noviembre, murió en el hospital a causa de un paro respiratorio y múltiples fracturas; el segundo falleció el 28 del mismo mes de forma súbita, al caer de varios metros y presentar una fractura craneoencefálica.
Los casos aún se encuentran en peritaje correspondiente y serán las autoridades de la Fiscalía General del Estado quienes confirmen la muerte por accidente laboral en ambos casos, para canalizar el dato a la STPS.
Estos incidentes no son fortuitos. Forman parte de una tendencia al alza en la falta de seguridad en los centros de trabajo que queda en evidencia en las estadísticas que se han presentado entre 2018 y 2019.
La tendencia del riesgo laboral en Quintana Roo va en aumento, ya que en 2018 por cada 100 mil trabajadores, 26 empleados se accidentaron en el área de trabajo, mientras que en 2019 se registró a 28.
A esto se suma otro gran problema; la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo reveló que la menor la mitad de los trabajadores carecen de algún servicio de salud o seguro médico, lo que los deja en alto grado de vulnerabilidad ante accidentes laborales, e incluso, trabajadores de la construcción señalan que en Quintana Roo es común que no se realicen contratos con los patrones, lo que, en caso de accidente, dificulta hacer responsable a empresas por irregularidades detectadas.
La secretaria del Trabajo explicó que los centros laborales tienen la obligación de dar vista al buen manejo de los protocolos de seguridad, sobre todo en aquellas labores que representan un riesgo para el trabajador.
Para recabar la información apropiada la Secretaría del Trabajo en conjunto con el Instituto Mexicano del Seguro Social, de manera anual publican una Memoria Estadística que incluye los riesgos de trabajo en la población afiliada. Se prevé que este año haya un descenso, ya que durante el confinamiento muchos empleos y obras no se mantuvieron activas durante varios meses.
Por su parte, José Mérida, arquitecto de Cancún, dijo que las empresas dedicadas al ramo de la construcción deben contar con protocolos de seguridad y que los trabajadores también realicen sus labores con responsabilidad, ya que los accidentes se pueden prevenir con el uso de casco, botas especiales, conocer bien los procedimientos si la actividad representa un riesgo, el uso de arnés, si el trabajador labora en las alturas y todo eso lo tiene que proveer las empresas constructoras.
De acuerdo con la Ley Federal del Trabajo, en el ramo de la construcción como una actividad peligrosa, significa que los trabajadores están expuestos a un mayor riesgo a diferencia de otros trabajos.
El accidente de trabajo es toda lesión orgánica o perturbación funcional, inmediata o posterior, la muerte o la desaparición derivada de un acto delincuencial, producida repentinamente en ejercicio o con motivo del trabajo, cualesquiera que sean el lugar y el tiempo en que se preste.
Quedan incluidos en la definición anterior los accidentes que se produzcan al trasladarse el trabajador directamente de su domicilio al lugar del trabajo y de éste a aquél. Enfermedad de Trabajo es todo estado patológico derivado de la acción continuada de una causa que tenga su origen o motivo en el trabajo o en el medio en que el trabajador se vea obligado a prestar sus servicios.
Con base en los tipos de riesgo de la Secretaría del Trabajo, en Quintana Roo, 83 por ciento de los accidentados fueron en el área de trabajo, mientras que 14 por ciento se dieron durante el trayecto, es decir, de su casa a su lugar de trabajo y 2.11 por ciento son enfermedades derivadas por la misma actividad laboral.
A nivel nacional, en 2019 se dio a conocer que cada 75 segundos ocurrió un accidente laboral en la industria de la construcción y cada ocho horas murió un albañil. Pese a los riesgos, la mayoría carece de servicios médicos y seguros de vida.
Cuestionados trabajadores de la construcción, coinciden: son las condiciones en las cuales tenemos que trabajar todos los días para sobrevivir.
Con información de Angélica Gutiérrez