Cecilia Sánchez García, quien cayó en actos de corrupción cobrando por dar contratos a trabajadores de tierra de PEMEX, hoy busca desesperadamente ser la sucesora de Carlos Romero Deschamps, y senadora al mismo tiempo devengando dos salarios, pero además de ello, la funcionaria desde que ganó se mudó a la Ciudad de México y ni siquiera ha regresado al distrito número 2, que le dio el voto de confianza y que no ha cumplido sus promesas de campaña.
Para poder ser senadora solicitó permiso en Petróleos Mexicanos (PEMEX), ya que ella era parte del sindicato de la Sección 47 que representa el corrupto de Víctor Kidnie de la Cruz, por ello, la deja inactiva ante el sindicato y la empresa, siendo uno de los requisitos para poder ser contendiente a cualquier tipo de representatividad sindical debe estar como trabajadora activa.
De acuerdo a la ficha técnica en el portal de trasparencia de Petróleos Mexicanos, Celia Sánchez está bajo la figura de permiso renunciable, el cual quedan suspendidos todos sus derechos sindicales para poder representar sindicalmente a los obreros del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, tendría que dejar el Senado, el cual no quiere y desde ahí pretende dirigir el STPRM.
Los mismos obreros transitorios denunciaron a la funcionaria de cobrarles cuotas de hasta 15 mil pesos para que les diera contratos para subir a trabajar a plataforma, ya que fue secretaria del Trabajo en el sindicato de la Sección 47, incluso fue de las que apoyaba fielmente a Carlos Romero, quien dejó el sindicato por ser acusado de desvío de millones de dólares del sindicato petrolero.
Cabe señalar que no sólo tiene un pasado lleno de corrupción dentro del sindicato petrolero, sino que además fue militante del Partido Revolucionario Institucional y hoy busca aprovecharse de su cargo para ser la próxima cacique del STPRM.
(Texto y foto: Redacción /
POR ESTO!)