Los frentes fríos que de forma constante entran a la Isla de Carmen afectan al sector ribereño, porque les genera pérdidas hasta por 90 mil pesos al día, si se habla de unas 300 embarcaciones que quedan varadas en el muelle conocido como Arroyo Grande, lo que significa un golpe para el bolsillo de los hombres de mar, señaló José Luis Escalante Morales, presidente de la Federación de Sociedades Cooperativas Pesqueras Ribereñas “Rebeldes de la Caleta”.
Indicó que las pérdidas se ven por todos lados, para el pescador como para el dueño de la embarcación, así como para el comerciante de pescados y mariscos de los mercados, porque con el mal tiempo escasean los productos marinos, ya que los eventos de los frentes fríos es una rutina que se está viendo de forma frecuente y los que resienten el impacto son los que se dedican a la pesca del camarón y escama.
Laboran sólo dos días
Escalante Morales mencionó que los nortes han estado pegando muy seguido y esto hace que los pescadores laboren sólo dos días a la semana y actualmente hay otro frente frío anunciado y esto podría afectar en cuanto a producción para surtir el mercado local ante esta temporada de cuaresma, pues si no hay trabajo no hay producción para el consumo.
Apuntó que todo esto se debe a que no hay en abundancia de especies, y no sólo escasea ni que los precios se elevan, por ejemplo el kilo del camarón grande vale más de 200 pesos y el siete barbas, a 100 pesos la colita (sin cabeza), el robalo se vende en 150 pesos el kilo, la chopa a 70 pesos, son un poco elevados los costos, pero las ganancias que quedan se reflejan en el bolsillo de los pescadores y esto se debe a que no hay producción.
Señaló que el mal tiempo afectó al sector pesquero ribereño, pero no a todos, pues los que tienen embarcaciones grandes, como el de W26, se van a la Laguna a pescar robalo, las de W23 se quedan varadas porque no tienen autonomía en la Laguna por las marejadas que se dan; y se considera que son unas 300 embarcaciones que quedaron paradas, de las cuales cada una genera a diario tres mil pesos, pero de eso se deducen los costos de operación.
Manifestó que pese a las bajas capturas de especies marinas no se ha registrado desabasto de los productos del mar en el mercado local, dado que el consumo ha registrado un comportamiento a la baja, pero se espera que para cuaresma pueda verse afectado el mercado local, ya que es la temporada cuando las familias consumen más pescados y mariscos.
Finalizó diciendo que lo que vendrá a favorecer a los expendedores de pescados y mariscos en la temporada de cuaresma son los productores de mojarras que cuentan con viveros, pero en la cuestión de pesca se verá escaso, por los frentes fríos que son de forma constante y que afecta al sector ribereño.
(Texto y fotos: Fernando Kantún)