Por María Luisa Vázquez
Con sorpresa reaccionaron regidores tras el anuncio del Presidente de la República de eliminar los fines de semana largos, aunque reconocieron que en el caso de Cancún, si bien depende de la industria turística, también es necesario fomentar la parte cívica.
La regidora Anahí González reconoció que, si bien se ganaron fines de semana largos, se perdió la parte cívica e histórica de los días que se crearon para recordar hechos que dieron vida a México. Al respecto, el regidor, Jorge Sanem dijo que “como todo, tendrá sus pro y contra”.
Desde el 2007, por orden del entonces presidente Vicente Fox, se establecieron tres fines de semana largos, con lo que los mexicanos contaban con el lunes como descanso obligatorio.
Este miércoles, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que planteará reformas al calendario oficial para terminar con esto y que las fechas históricas se conmemoren en su día, pues la gente ya no sabe qué se celebra.
Los puentes que se verían afectados por la decisión del presidente serían las conmemoraciones de los días 5 de febrero, 21 de marzo y 20 de noviembre. El 16 de septiembre, Día de la Independencia, siempre se celebra el día que corresponde y no se recorre.
Ayer la regidora Anahí González, presidenta de la Comisión de Turismo en el Cabildo, mostró su sorpresa sobre la propuesta presidencial, pero reconoció que si bien los fines de semana largos son aprovechados por mucha gente para tomarse un descanso, las nuevas generaciones deben conocer más sobre la historia de México porque los eventos cívicos han sido relegados, y ya no es común la realización de desfiles ni actos cívicos.
Confió en que se encontrará un punto medio, a fin de que tampoco se afecte el tradicional “puente”, que en el caso de Cancún sí genera derrama económica por la gran cantidad de residentes nacionales que se mueve hacia este centro turístico.
El regidor Jorge Sanem no ocultó su sorpresa sobre la propuesta, aunque reconoció que “cualquier propuesta tendrá su pro y contra”.