Los pequeños comerciantes de la Isla se han visto severamente afectados por la pandemia del COVID-19, pues algunos han decidido cerrar por la falta de clientes, mientras los que mantienen abierto sólo logran vender un 20 por ciento de lo habitual.
El negocio de venta de antojitos “Las Chalupas”, que se encuentra ubicado en la colonia San Carlos, no escapa de esta situación, donde el joven Víctor Díaz Torres nos platicó que el alza de los precios de los insumos los perjudica.
Otra de las causas que afectan a los pequeños negocios, es que las personas prefieren comprar víveres entes que comida preparada. “Es muy visible la falta de clientes, pues se mantienen en sus casas, aislados por miedo a ser contagiados, ante situación que alarma y mantiene paralizada a la isla entera. A pesar de ello, vamos a seguir trabajando aquí y ofreciendo nuestros productos a domicilio, hasta donde se pueda y hasta donde no los permitan, ya que de la venta diaria dependen nuestras familias, si no trabajamos, no comemos”, culminó el joven comerciante.
(Texto y foto: Patricia Gómez)