Por la Redacción
CHETUMAL 4 abril.- En medio de la situación crítica que se vive por la emergencia sanitaria por el coronavirus, tres médicos especialistas del Hospital General de Chetumal que fueron comisionados para trabajar en el área de Urgencias se declararon no competentes para atender a pacientes en ese lugar, pero manifestaron estar en completa disposición para continuar laborando dentro del área de su especialidad.
C. E. C. H., cirujano urólogo; realizó un oficio en el que dijo lo siguiente: “Me declaró no competente para la atención del servicio de Urgencias para pacientes a mi especialidad.
La razón de lo anterior es motivado por las implicaciones médico legales a las que me someto por atender patologías en las que no tengo experiencia de manejo, incurriendo en responsabilidad medica, toda vez que se realiza alguna interacción, procedimiento y/o alguna nota médica con título y cédula profesional a mi nombre.
Así como el riesgo en la seguridad del paciente y el riesgo a iatrogenias que pueden conducir a una mala evolución del mismo.
Reitero mi total disposición en lo que a mi especialidad respecta, incluyendo valoración, diagnóstico y tratamiento durante esta contingencia a cualquier paciente urológico que lo amerite, siempre y cuando se dote de las medidas de protección necesarias, mismas que hasta el momento son precarias e insuficientes ante el riesgo que implica esta enfermedad”, concluyó el documento.
Por su parte, P. J. A. V., medico radiólogo en el Hospital General de Chetumal, precisó en su oficio lo siguiente: “Me declaro no competente para la atención del servicio de Urgencias para pacientes a mi especialidad.
La razón de lo anterior es motivado por las implicaciones medico legales a las que me someto por atender patologías en las que no tengo experiencia de manejo, incurriendo en responsabilidad médica, toda vez que se realiza alguna interacción, procedimiento y/o alguna nota médica con título y cédula profesional a mi nombre.
Así como el riesgo en la seguridad del paciente y el riesgo a iatrogenias que pueden conducir a una mala evolución del mismo.
Reitero mi total disposición en lo que a mi especialidad respecta (radiología e imagen) durante esta contingencia, siempre y cuando se dote de las medidas de protección y bioseguridad necesarias.
En el tema de pacientes de COVID-19 positivos, insisto en que soy de más ayuda como apoyo en cuestiones de mi especialidad que como apoyo clínico y manejo hospitalario”, concluyó el especialista.
Por último, J. E. G. R., médico otorrinolaringólogo, en el documento que mandó a sus superiores dijo lo siguiente: “Me declaro no competente para la atención del servicio de Urgencias para pacientes a mi especialidad.
La razón de lo anterior es motivado por las implicaciones medico legales a las que me someto por atender patologías en las que no tengo experiencia de manejo, incurriendo en responsabilidad médica, toda vez que se realiza alguna interacción, procedimiento y/o alguna nota médica con título y cédula profesional a mi nombre. Así como el riesgo en la seguridad el paciente y el riesgo a iatrogenias que pueden conducir a una mala evolución del mismo.
Reitero mi total disposición en lo que a mi especialidad respecta (otorrinolaringología) durante esta contingencia, siempre y cuando se dote de las medidas de protección y bioseguridad necesarias.
Con fundamento en fracción del artículo segundo del acuerdo, por el que se establecen medidas preventivas que se deberían implementar en la mitigación y control de los riesgos para la salud, que implica la enfermedad por el virus SARS-Cov2, publicado por el DOF, ya que pertenezco al grupo de mayor riesgo de mortalidad al ser un masculino de 33 años de edad, con enfermedades crónico-degenerativas como hipertensión arterial descontrolada, dislipidemia familiar y síndrome de apnea-hipopnea obstructiva del sueño, así como ser de la especialidad de mayor riesgo, que no sea de su competencia las infecciones de vías respiratorias bajas como la que ocasiona el COVID-19”.
En fin, los tres especialistas se declararon no competentes para trabajar en el área de Urgencias del Hospital General con las justificaciones ya mencionadas.
Y es que en el Hospital General hay inconformidad entre el personal, ya que aseguran que con la situación que se vive en Quintana Roo y el mundo, se requiere equipo de trabajo e insumos para tratar a pacientes sospechosos de COVID-19.
Además, apenas el 25 de marzo del presente año, personal de Enfermería se manifestó por la falta de insumos y equipo adecuado para protegerse del COVID-19, situación que podría volverse a presentar debido a la presión que tiene el personal ante la contingencia sanitaria mundial por el nuevo coronavirus y el temor que tienen ante el fácil contagio del mal.