Quintana Roo

Esperan no manden cerrar sus negocios en el Centro

Mientras la mayoria de muchas tiendas de la ciudad fueron cerradas sus puertas y finiquitaron al personal que laboraba, con la promesa de volverlos a llamar en cuanto pase la emergencia sanitaria del COVID-19 en Carmen, sólo se mantienen abiertos algunos negocios que brindan servicio de préstamos de dinero, negocios como Casa Mazatlan, Prendamex, Elektra, Coppel, comerciantes de comidas y bebidas, más del 70 por ciento permanece cerrado sobreviviendo el 30 por ciento de los locales del Centro de la ciudad, sobreviven con miedo de que sean cerrados sus fuentes de trabajo en cualquier momento.

Los pequeños comercios y el ambulantaje, son los únicos giros que se han mantenido en operación hasta el momento decretado, pese a la medida de restricción por “la sana distancia”, los dueños de locales de comida, taquerías, ropa, casas de empeño, farmacias, entre otros mantienen las cortinas abiertas ante el temor de irse a la bancarrota.

“No queda de otra, hay que seguir abriendo, el negocio es mi patrimonio y no lo puedo descansar”, comentó Roberto Herrera, locatario en la zona del Centro de un puesto de relojes.

En las calles del Centro la actividad comercial se mantiene casi de forma normal, pese a que las autoridades de Copriscam han reforzado los operativos en contra del comercio informal, los ambulantes siguen acudiendo a diario para intentar vender.

Pese a sus esfuerzos y no cerrar sus negocios, las ventas han caído casi en un 80 por ciento, afirman comerciantes.

“No, pues las ventas están por los suelos, realmente bajó al 80 por ciento, no hay clientes”, comentó el vendedor; la mayoría de comerciantes temen más por el pago de rentas de los locales, la luz y otros servicios que deben mantener, pero sus ventas están cayendo conforme pasa la cuarentena.

“Lo difícil se viene con el pago de la renta, son por lo menos cinco mil pesos mensuales, también hay que pagar la mercancía que pides a crédito”, comentó el locatario de zapatos y cinturones, aunque los locales de comida pueden seguir abiertos sin temor a ser multados, la poca afluencia de personas en las calles de Ciudad del Carmen provocaron su cierre.

(Texto y fotos: Patricia Gómez)