Por Justino Xiu Chan
FELIPE CARRILLO PUERTO, 15 DE MAYO.- Por enésima ocasión, los filtros sanitarios ubicados en los accesos a la ciudad generaron molestia entre los ciudadanos que tienen la necesidad de ingresar a la cabecera municipal, ya sea para abastecerse de alimentos o realizar alguna diligencia, pues no se les permite el acceso.
Por la mañana, el filtro de acceso ubicado por la cárcel municipal, rumbo a la carretera que conduce a Mérida, nuevamente fue escenario de queja de ciudadanos provenientes de las comunidades rurales, que por alguna necesidad tienen que viajar a la cabecera municipal.
Trascendió que las nuevas disposiciones municipales son que únicamente pueden ingresar a la ciudad los residentes, y que las personas de las comunidades podrán ingresar en forma pedestre, pero sus vehículos no podrán acceder.
Afecta a personas de zonas rurales
Esta situación causó molestia a decenas de personas y acusaron que los encargados de estos lugares no tienen la capacidad de tomar un criterio para resolver el problema que se viene generando.
Muchas personas provenientes de las comunidades rurales de este municipio tuvieron que esperar mucho tiempo para acceder a la ciudad; y en algunos casos, no lo lograron.
Taxistas también protestan
Mientras que en el filtro sanitario que se ubica en el entronque de la ciudad con carretera a Valladolid, se registró un sobresalto entre agentes municipales y trabajadores del volante. Estos últimos se arremolinaron al considerar que los responsables de este punto de control únicamente están tomando criterios “a modo”.
Los taxistas mencionaron que hay un estricto control en el acceso, e incluso al momento de los hechos, un taxista no había podido ingresar a la ciudad; mientras que los trabajadores del volante considerados como tolerados, tenían el acceso libre para la ciudad.
Esta situación vino molestó a los taxistas que exigieron a los encargados del filtro “sea pareja la restricción de acceso o en su caso las facilidades sea para todos y no solo para unos cuantos”.
Luego de que se hicieron de palabras, regresó todo a la normalidad.