Por Lusio Kauil
JOSÉ MARÍA MORELOS, 2 de mayo.- Desde que se declaró la contingencia sanitaria en el municipio, los taxistas, tanto locales como foráneos, vieron un descenso drástico en la ocupación de sus servicios.
A pesar de la crítica situación, los chafiretes, no todos, siguensu rutina, pues desde muy temprano salen a ocupar espacio en el sitio que les corresponde, listos para ofrecer su servicio a la comunidad.
Muchas veces semantienen en su sitio hasta el mediodía sin pegar un viaje, pero no se mueven de ahí porque saben que en cualquier chico rato puede llegar alguna personapara solicitar servicio, confió ayer uno de los taxistas que se identificó como Jesús Castillo.
Los taxistas de las rutas foráneas, las que salen de las comunidades como La Esperanza, Sabán, Sacalaca, Plan de la Noria Poniente, Kancabchén, Othón Pompeyo Blanco, La Candelaria, Santa Gertrudis y Othón Pompeyo Blanco llegan a esta ciudad desde las 7 u 8 de la mañana, pero ahora con pocos usuarios.
Pedro Motul dijo que él sale de La Candelaria y muchas veces vacío, sin embargo, expresó que en otros poblados donde pasa, logra subir algunos pasajes y así llega a la ciudad con tres o 4 usuarios apenas.
Refirió que la gente no sale de su pueblo porque no tiene dinero, y por lo mismo, consideróque el gobierno debe pagar los apoyos pendientes para que los campesinos tengan dinero y manden a sus mujeres a comprar.
Manuel Noh Escamilla, otro de los taxistas foráneos, comentó que él casi no ha estado saliendo porque no hay pasaje desde que empezó la enfermedad del coronavirus.
Indicóque, si uno trae a José María Morelos 3 o 5 pasajes no es costeable, por el consumo de gasolina, y porque el camino a la Esperanza se encuentra en mal estado.
Otros taxistas que recorren rutas como la de Kancabchén y Naranjal confiaron que salen de la comunidad cuando hay pasaje, pero reconocieron que la enfermedad afectó mucho el servicio de taxi, porque la gente no sale como antes, salvo por cuestionesde compras en las tiendas de la cabecera municipal o, por algunaemergencia por enfermedad.