Síguenos

Volver

ÚLTIMA HORA

Internacional

Eligen a Hashem Safi al Din como nuevo líder de Hezbolá tras la muerte de su primo, Nasralá

Volver

Quintana Roo

Por Luis Enrique Cauich

 

SAN JUAN DE DIOS, 29 de mayo.- El sonido rasposo de los molinos de nixtamal, aún se pueden escuchar diariamente en la localidad de San Juan de Dios, donde todos los días acuden las amas de casa o mujeres adolescentes que se van encaminando a los quehaceres diarios, entre ellos el recoger el molino y realizar las tortillas de mano.

No hay tortillerías en esta localidad ubicada al sur de Lázaro Cárdenas y las propias mujeres, quienes omiten sus nombres, señalan que todos los días lavan su nixtamal y lo llevan a alguno de los dos molinos que todavía hay en la localidad, para obtener la masa y con ellopreparar las tortillas calientitas con las que se acompaña el desayuno, almuerzo o cena.

En una vieja palapa se ubica uno de los molinos, en el centro de la localidad que no supera los 300 habitantes, el cual es atendido por una adolescente que menciona que todos los días van amas de casa a moler, también acuden otras muchachitas que apoyan en sus hogares y van aprendiendo los quehaceres.

Con la pandemia y la cancelación de clases, las niñas apoyan en sus casas a sus madres llevando a moler el nixtamal, informa tímidamente la adolescente que se niega a dar su nombre o de las personas encargadas del molino, por temor a que se molesten.

El molino lleva varios años laborando y es el más concurrido, señalan las amas de casa que confirman que no hay tortillerías y tienen que tortear todos los días para alimentar a los miembros de la familia; al día tortean varios kilos para acompañar los alimentos del desayuno, almuerzo y la cena.

En tanto que los encargados añaden, que el moler el nixtamal de las amas de casa, les permite tener un poco de ingreso para apoyarse en esta pandemia que afecta a todo el mundo y es una de las actividades que no se ha detenido por ser esencial que espara las familias.

No se permite la aglomeración de personas y cuando llegan varias, las restantes dejan sus cubetas de nixtamal y más tarde regresan por la molienda, la cual se les cobra dependiendo del tamaño de la cubeta que lleve la ama de casa.

 

 

 

 

 

 

SIGUIENTE NOTICIA

Quintana Roo

Holbox no bajará la guardia.