CIJ, sin fondos para rehabilitación

Por Yolanda  Gutiérrez

El proyecto de construcción de la clínica de adicciones en Playa del Carmen que operaría el Gobierno del Estado a través de los Centros de Integración Juvenil  (CIJ) está detenido,  hasta encontrar  recursos que permitan ponerlo en marcha; Liliam Negrete Estrella, directora del CIJ de Cancún, manifestó que también la suspensión se debió a la contingencia del COVID-19.

Las proyecciones apuntaban, en un principio, a una inversión estimada en 30 millones de pesos que serían aportados por el gobierno estatal, el municipio de Solidaridad y la iniciativa privada.

Para comenzar con la construcción de la clínica de adicciones se requería de una inversión inicial de 20 millones de pesos y la intención era que comenzase a operar en el transcurso de este 2020, pero hasta estos momentos no se ha concretado.

Liliam Negrete comentó respecto al tema que el proyecto está pendiente, “obvio que por situación del COVID-19 todo está parado, pero el proyecto está, continúa y se están viendo los recursos para poder  proseguir”.

En otro orden de ideas y a pregunta expresa, la directora del CIJ consideró que para las personas adictas a alguna sustancia prohibida el confinamiento no representa ningún impedimento para obtenerla, aunque por otra parte el apoyo de la familia es más cercano, por la misma situación.

“Hoy en día es sencillo, no es como antes que la única opción era salir a buscarlo a la calle, ahora se puede conseguir vía telefónica, por facebook o alguna otra red social y las entregas suelen ser a domicilio, incluso se ha utilizado desde tiempo atrás el servicio de mensajería”.

Agregó que para una persona drogodependiente, el confinamiento no es impedimento para que pueda salir en busca de la sustancia que necesita y la preocupación de la familia es cómo controlarlos y hacer que se queden en casa, saber manejar la situación porque si en la desesperación se le permite salir, puede ponerse en peligro o poner en riesgo de contagio sus familiares.

Respecto al alcohol, mencionó, sin dar cifras, que es Cancún es alto el porcentaje de personas que, pese a tomar unas copas, no han desarrollado alcoholismo, pero el confinamiento sí puede alterar esta situación y aumentar el consumo de bebidas espirituosas entre los bebedores esporádicos o sociales.